Islamabad: la archidiócesis apuesta por el críquet para promocionar a los jóvenes

de Shafique Khokhar

Creado a instancias del arzobispo Joseph Arshad, el torneo diocesano alcanza ya su quinta edición con la participación de 14 equipos de las distintas parroquias. Una muestra de la apuesta por los jóvenes en el convencimiento de que el deporte también puede ayudar a las minorías a salir de los márgenes de la sociedad pakistaní.

Rawalpindi (AsiaNews) - Aunque el talento deportivo venga en parte dado por Dios, todos conocemos la importancia de cultivarlo mediante un proceso bien estructurado. Es innegable que la juventud pakistaní tiene talento, capacidad física y fortaleza mental en diversos deportes. Sin embargo, los esfuerzos por reactivar y promover el deporte en el país a menudo flaquean debido a las limitaciones financieras, la falta de transparencia y la ausencia de una política deportiva nacional que se ajuste a las aspiraciones de los jóvenes. Y es un problema que afecta especialmente a los jóvenes cristianos, que como minoría suelen enfrentarse a retos adicionales. A pesar de su talento, la falta de recursos suele desmotivarlos. Para hacer frente a este problema, desde 2020, el arzobispo de Islamabad-Rawalpindi, monseñor Joseph Arshad, ha puesto en marcha la iniciativa de un torneo diocesano de críquet entre todas las iglesias de la diócesis, que ya va por su quinto año.

Los jóvenes son una prioridad de la pastoral de monseñor Arshad: para ellos ha creado una Academia CSS (la institución educativa que prepara para el examen de Estado, ed.), dotándoles de las herramientas necesarias para preparar oposiciones y sobresalir en su vida académica y profesional. Y es mirando al crecimiento global de la persona como encaja también el enfoque en el deporte. En una sociedad en la que los cristianos se enfrentan a menudo a tabúes sociales y a la marginación, el deporte puede ser una poderosa herramienta para romper barreras y cambiar mentalidades. Al practicar deporte, los jóvenes cristianos no sólo adquieren resiliencia y confianza en sí mismos, sino que también desafían los prejuicios, contribuyendo a remodelar las percepciones de la sociedad.

El campo de críquet femenino de la St. Mary's Academy se llenó de emoción con motivo del quinto torneo diocesano de críquet que reunió a 14 equipos cristianos, que compitieron durante un mes a partir de la segunda semana de septiembre. En la final se enfrentaron los equipos de las iglesias de Islamabad y Westridge, y el primero se hizo con el trofeo tras un partido tenso y emocionante.

Durante la ceremonia de entrega de premios, el arzobispo Arshad bendijo tanto a los equipos ganadores como a los perdedores, prometiendo seguir esforzándose por su progreso y crecimiento en los campos del deporte y la educación, inspirando esperanza y unidad entre los jóvenes. El acto atrajo una amplia atención, con la asistencia de destacados miembros de la junta de críquet, organizaciones locales y líderes comunitarios. Su participación puso de relieve la importancia de estos actos para fomentar las relaciones entre la Iglesia, los jóvenes y la comunidad local en su conjunto.