Ishiba, un político de largo recorrido para la era post-Kishida
El ex ministro de Defensa, de 67 años, venció en segunda vuelta en las elecciones primarias del Partido Liberal Democrático japonés a Sanae Takaichi, la candidata más afín al legado de Shinzo Abe. Será nombrado primer ministro el 1 de octubre y estará llamado a impulsar el apoyo a la fuerza política que ha sido clave en la escena política japonesa desde la posguerra. Pero ya se vislumbra en el horizonte un enfrentamiento electoral con el líder de la oposición, Yoshihiko Noda.
Tokio (AsiaNews) - El ex ministro de Defensa Shigeru Ishiba, de 67 años, ha ganado las elecciones primarias del Partido Liberal Democrático en Japón, derrotando en segunda vuelta a la ministra de Seguridad Económica Sanae Takaichi, que aspiraba a convertirse en la primera mujer primer ministro de Japón. En realidad, la votación está destinada a designar al sucesor de Fumio Kishida, quien -en una crisis de consenso- había anunciado el mes pasado su intención de echarse a un lado. Se espera que Ishiba forme el nuevo gobierno en una sesión extraordinaria de la Dieta, ya convocada para el 1 de octubre. Inmediatamente después, se considera probable la opción de llevar al país a unas elecciones anticipadas, quizá ya a finales de año.
Hasta nueve candidatos se postulan para liderar el partido que ha dominado casi ininterrumpidamente la escena política japonesa desde la posguerra. Un número inusualmente alto, vinculado también a la disolución de las poderosas corrientes decididas tras los escándalos sobre su financiación. Entre los excluidos de la votación está el joven Shinjiro Koizumi, de 43 años, hijo del ex primer ministro Junichirō Koizumi. En cambio, Ishiba es un político de larga trayectoria, que llegó a la dirección del Partido Liberal Democrático tras haber sido derrotado cuatro veces en el pasado en la carrera por el liderazgo en las elecciones primarias.
Esta vez se impuso por un estrecho margen, al cosechar 215 votos frente a los 194 de Takaichi, exponente del ala conservadora que permanece más ligada al legado de Shinzo Abe, el ex primer ministro asesinado en 2022. Natural de Tokio, hijo también de un ex ministro del Interior, Ishiba es conocido como un político experimentado en temas de defensa y revitalización regional, popular entre los simpatizantes locales pero no tanto entre los diputados del partido.
Ahora se enfrentará al reto de renovar una fuerza política debilitada por los escándalos de cajas negras y recuperar la confianza de los votantes de cara a las no muy lejanas elecciones generales, en las que chocará con Yoshihiko Noda, el político de la oposición que dirigió brevemente el Gobierno del país en 2011 y al que el Partido Democrático Constitucional volvió a elegir como líder en sus elecciones primarias celebradas esta misma semana.
Un enfrentamiento se vislumbra en el horizonte de un Japón en el que el crecimiento económico sigue siendo incierto y los costes de los hogares continúan aumentando. Y en un contexto internacional en el que las tensas relaciones con China, Corea del Norte y Rusia siguen suponiendo una amenaza para la seguridad de Japón.
18/07/2022 14:39