Interrumpido por la fuerza un momento de oración en familia

de Mathias Hariyadi

Mientras la oración estaba en curso entre los miembros de una familia llegaron de repente 2 personas, diciendo que tal encuentro familiar está prohibido. El incidente y las relativas filmaciones aparecieron en las redes sociales: una explosión de noticias que rápidamente suscitó gran atención a parte de la sociedad indonesia.

Yakarta (AsiaNews) – En este tiempo, en el cual todas las actividades públicas están severamente prohibidas y se aconseja a todos permanecer y trabajar desde casa, un momento de oración dentro de una reunión familiar fue de repente interrumpido. La prohibición fue impuesto por la fuerza y con mucha mala educación cuando 2 hombres entraron de improviso a la casa de una familia y les dijeron que interrumpieran sus oraciones.

El hecho sucedió a una familia de Christian Batak Protestant Church (HKBP) en el pueblo de Rawasenul en Jayamukti de Cikarang, Bekasi Regency de Java Occidental el domingo 19 de abril. Mientras la oración estaba en curso entre los miembros de la familia, llegaron 2 personas de repente, acusando que tal reunión estaba prohibida.

El incidente y las relativas filmaciones aparecieron en las redes sociales: una explosión de noticias que rápidamente suscitó gran atención a parte de la sociedad indonesia.

Los 2 hombres son conocidos como el jefe del pueblo y uno de los vecinos de la familia.

Pero la familia mostró una fuerte resistencia, entre otras cosas realizando un video sobre lo que estaba ocurriendo. Dándose cuenta que su modo de obrar estaba siendo filmada por la familia, la rabia del jefe del pueblo aumentó e intimó a la señora que interrumpiera las filmaciones tratando de sacarle el teléfono celular. Pero, no lo logró y entonces decidió irse ya que el video habría de ser transmitido.

“Estamos acostumbrados- dijo Arion Sihombing en su sitio- a rezar juntos, pero aquellas personas que llegaron de repente a nuestra casa y nos ordenaron dejar de rezar”. Agregó que un gesto tan hostil hacia su familia no se realizó sólo ayer, sino muy a menudo en el pasado. “D lo que tenemos miedo-explicó- es que estas personas traigan a sus seguidores para cumpliractos violentos, como ya sucedió a nosotros hace unos 12 años atrás, cuando fuimos obligados a afrontar a un agran multitud que protestaba contra nuestra reunión y nuestra oración en familia. Estuvimos bajo presión por un mes y cada noche nos tiraban piedras contra nuestra casa”.

Después de tales manifestaciones , la familia fue obligada a no realizar ninguna actividad de culto en nuestra casa hasta ayer, cuando se verificó el nuevo incidente.

Cuando el video apareció en las redes sociales, el incidente atrajo la atención por parte del público que censuró los gestos hostiles realizados por el jefe del pueblo y por un vecino.

La cuestión se volvió delicada en cuanto este incidente involucró un encuentro religioso familiar, desde el momento que en las últimas semanas para cada congregación cristiana son posibles sólo servicios de culto on-line.

Horas después, se realizó una discusión mediada en el cuartel general de la policía local y todo se resolvió pacíficamente.

Entre los católicos, la celebración on-line se realiza cotidianamente y semanalmente en cada parroquia de la nación.

Durante la Semana Santa, las misas online del Card. Ignazio Suharyo en la basílica de Yakarta fueron seguidas por al menos 30 mil espectadores “instantáneos” con sus teléfonos celulares. Otros miles siguieron las ceremonias por televisión.

Cuando el Papa dio la bendición Urbi et Orbi y la indulgencia plenaria, decenas de miles de grupos católicos indonesios siguieron el programa.

Hoy se convirtió en un nuevo fenómeno en Indonesia la gran atención del público por cada programa de celebración online ya sea de la Iglesia indonesia como las del Vaticano. Cada vez que habrá un similar programa, miles de congregaciones católicas buscan ideas y sugerencias a través de las redes sociales en el canal disponible de tal modo de poder seguir el programa.