India, incluso los no católicos rezan a la Virgen de Gunadala
Ayer, la diócesis festejó la memoria de la Virgen de Lourdes. Una imagen de la Virgen fue trasladada en 1928 por los padres del PIME, quienes también habían fundado la diócesis. Ésta fue colocada sobre una colina “para proteger la ciudad y mantenerla más cerca de Jesús”. La fiesta por el aniversario de la primera aparición de la Virgen a Bernadette atrajo a 1,4 millones de fieles, incluyendo a no cristianos.
Vijayawada (AsiaNews) – La estatua de la Virgen María “puesta en la cima de la colina es el medio a través del cual se difunde la gracia divina sobre la ciudad de Vijayawada entera”. Fue lo que dijo Mons. Joseph Raja Rao Thelagathoti durante la celebración de su primera misa en el Santuario de Nuestra Señora Gunadala Matha, luego de la toma de posesión de la sede del obispado de Vijayawada. Su primera celebración coincidió con los festejos por la Virgen de Lourdes que, para la diócesis, reviste un significado particular. Mons. Raja Rao, de hecho, recordó que el Santuario de Gunadala Matha nace por iniciativa de los misioneros del PIME (Pontificio Instituto de las Misiones Extranjeras) , que en 1928 llevaron una imagen de la Virgen de Lourdes y la establecieron sobre la colina “para proteger la ciudad y mantenerla más cerca de Jesús”.
El obispo explicó: “La Virgen de Lourdes que llegó a Vijayawada es la misma que hoy bendice la ciudad como Nuestra Señora de Gunadala Matha”. Durante la homilía explicó el origen de la fiesta, que se remonta a la primera aparición de la Virgen a la pequeña Bernadette, ocurrida en 1858. La Virgen, continúa el prelado, “explicó a santa Bernadette cómo obtener la misericordia de Dios a través del rezo del Rosario y la práctica de la penitencia, para convertir a un mundo pecador que, de otra manera, está destinado a ser destruido”.
La misa fue concelebrada por Mons. Govindu Joji di Nalgonda, por el obispo emérito Mathew Cheriankunnel (misionero del PIME) así como por alrededor de 200 sacerdotes. Las celebraciones por el aniversario se llevaron a cabo a lo largo de tres días, del 9 al 11 de febrero, y fueron precedidas por una novena de oración, durante la cual, cada día, los fieles acudían en procesión al santuario sobre la colina, llevando a su paso velas encendidas.
El Padre Chinappa, rector del santuario, refiere: “Este año casi 1,4 millones de personas participaron en los diferentes momentos. Esta cifra refleja la cultura transversal de la congregación. Gran parte de esta multitud fluctuante está conformada por personas pertenecientes a los credos más variados, que han venido aquí para encontrar la paz y ponerse en sintonía con la Madre de Dios. Ellos han llevado ofrendas de flores, han partido cáscaras de coco frente a la Virgen, de acuerdo con el tradicional fervor indio. Las personas vienen para hacer un voto o bien para cumplirlo, para hacer penitencia, o la busca de un milagro”.
Los fieles forman una fila desde las primeras horas de la mañana, y luego emprenden el camino de ascensión por la colina. Hacia la mitad del camino se detienen a rezar frente a la gruta de la Virgen y luego prosiguen hasta la cima, donde se alza una cruz. “Durante la subida, que dura casi una hora –dice el rector- hay puestos donde los fieles pueden cortarse el cabello, como signo de sumisión a la Virgen. Raparse el cabello es un acto de penitencia, con el cual se encomienda a la Virgen la protección de los niños, o se agradece la gracia recibida”.
Al término de la misa, Mons. Raja Rao invitó a la asamblea a “emprender una peregrinación espiritual y a dejarse atraer por María, la Madre del universo, que aquí, en Vijayawada ha venido a residir como Gunadala Matha”.
*Misionera de la Inmaculada, Congregación femenina asociada al Pontificio Instituto de la Misiones Extranjeras (PIME)
07/12/2016 14:49