Hong Kong: prohíben subdividir los apartamentos de menos de 8 m2 (pero siguen las 'casas ataúd')
El jefe ejecutivo John Lee lo anunció hoy en un discurso programático. Según datos públicos, hay más de 100 mil viviendas de esta categoría, que serán desmanteladas progresivamente. Pero la normativa no incluye las camas donde viven miles de personas debido a la crisis habitacional de Hong Kong.
Hong Kong (AsiaNews/Agencias)- El jefe ejecutivo de Hong Kong, John Lee, anunció que los apartamentos subdivididos con una superficie inferior a ocho metros cuadrados serán eliminados progresivamente. Sin embargo las "casas ataúd", reglamentadas y legalizadas hace treinta años, no estarán sujetas a la nueva normativa. En su tercer discurso sobre las políticas de gobierno, Lee dijo que los mini-apartamentos serán definidos como “unidades habitacionales básicas” y deben incluir ventanas y un baño privado.
Los datos oficiales muestran que en 2021 Hong Kong tenía 108.200 apartamentos subdivididos. Según la ONG Society for Community Organization, alrededor de 250.000 personas viven en estos espacios reducidos debido a los precios elevados de la vivienda. La construcción de nuevas paredes divisorias requiere muchas veces la modificación de los desagües, dando lugar a situaciones que muchas veces comprometen la higiene y seguridad de todo el edificio.
John Lee ya había hablado sobre su intención de establecer normas mínimas en materia de vivienda. Hoy volvió a repetir que “las unidades actualmente divididas varían considerablemente en cuanto a seguridad contra incendios, ventilación, superficie, disponibilidad de cocina y baño individual y si están separados, por lo que es necesario establecer estándares mínimos para eliminar las unidades inadecuadas”. Las nuevas normas también tendrán en cuenta la "demanda real", añadió Lee.
Sin embargo, las "casas ataúd", también conocidas como "casas jaula" - espacios diminutos en los que normalmente sólo cabe una cama - no estarán incluidas en la nueva legislación y seguirán clasificadas como apartamentos. En efecto, muchos espacios han sido reconvertidos para dar cabida a más personas, asignando a cada una una plaza para dormir. Las normas actuales, que se establecieron en 1994, requieren que las unidades con más de 12 camas cuenten con una licencia especial, pero la mayoría de los propietarios elude esto registrando 11 camas. Una fuente de la Oficina de Asuntos Internos y Juveniles dijo a Hong Kong Free Press que el gobierno podría revisar los requisitos para conceder la licencia.
Diversas investigaciones han mostrado que las personas que viven en las "casas ataúd" - que pueden costar hasta 300 dólares al mes - son principalmente jubilados, trabajadores pobres, familias de bajos ingresos y drogadictos. En efecto, en Hong Kong hay más de siete millones de habitantes en una superficie de 1.106 kilómetros cuadrados y el salario medio ronda los 1.200 dólares mensuales.
En el caso de los apartamentos subdivididos, los propietarios tendrán un período de tiempo para adecuarse a los nuevos estándares si registran sus propiedades, mientras que las unidades "que no cumplan" con la normativa podrían enfrentar responsabilidad penal, dijo Lee. Las autoridades reasignarán después las viviendas a aquellos que todavía no hayan solicitado una vivienda pública pero que tendrían derecho a ella, "teniendo en cuenta la oferta de 'unidades habitacionales básicas' en el mercado", explicó el jefe ejecutivo de Hong Kong.