Histórica visita de Shinzo Abe a Darwin, destruida por las tropas japonesas

Japón y Australia tratan de contrastar el activismo chino en el área del Pacífico creando lazos económicos y militares cada vez más estrechos. El líder japonés rinde homenaje a la memoria de las víctimas del peor acto de guerra jamás sucedido en territorio australiano. E inmediatamente inaugura un gasoducto valuado en 34 millardos de dólares.

Darwin (AsiaNews/Agencias) – El Premier japonés Shinzo Abe realizó esta mañana una visita definida “histórica” a la ciudad australiana de Darwin, bombardeada hace 75 años por las tropas imperiales. Él es el primer líder japonés que visita el área, que en 1942-43 es atacada por el Sol Naciente en el peor acto de guerra jamás sufrido por Australia. Los dos días de Abe en el país, en vista del encuentro Apec que se inicia mañana, que parece estarán más concentrados sobre el comercio.

Realizada con gran deferencia la ceremonia formal, con la deposición de una corona de flores en el memorial de los soldados muertos en el ataque. Abe se encontró con contraparte australiana Scott Morrison para hablar de la balanza comercial y de una mayor cooperación en campo defensivo.

De hecho, inmediatamente después del homenaje a las víctimas, el líder japonés participó en la inauguración de un oleoducto del valor de 34 millardos de dólares gestionado en su mayor parte por la Japan’s Inpex. e trata de uno de los proyectos más importantes en acto en Australia y prevé el envío de gas natural a Japón haciendo de Canberra el mayor proveedor energético del Sol Saliente.

Según algunos analistas, este acercamiento entre las dos naciones- y el homenaje en memoria de las víctimas de la agresión japonesa- se debe leer en clave anti-china. Beijing está muy activa desde el punto de vista económico en la región del Pacífico, actividades vistas con sospecha ya sea por Japón como por Australia.

El proyecto chino que más preocupa es el así llamado “Belt and Road”, que en las intenciones de Xi Jinping debería hacer revivir los fastos de la antigua “Vía de la Seda” del Imperio chino, mirando a la creación, desde aquí a 2050, de un enorme red de las vías de transporte en grado de crear una finísima y articulada red de infraestructuras, ferrocarriles, rutas y líneas marítimas- la Silk Road Economic Belt e la Silk Maritime Road – gasoductos y oleoductos que pongan en comunicación China y el Oriente Extremo con la entera Asia, Europa y el Mediterráneo.