Hanói, misión y vida religiosa: temas centrales de la visita del Card. Braz de Aviz
El prefecto de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica se reunió con el clero de Xuân Lộc, Saigón, Huế y Hanói. Expresó su gratitud a los 117 mártires de Vietnam por “la vitalidad y la juventud que caracterizan el rostro de la Iglesia local”. “Entreguémonos a Jesús para alcanzar el fin de su amor. Este es la única razón de la vida consagrada”.
Hanói (AsiaNews) – Evangelización y ministerio religioso son los temas que definieron la visita pastoral a Vietnam del Card. João Braz de Aviz (foto 1), prefecto de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica. Del 2 al 7 de septiembre pasados, el cardenal brasileño participó en la conferencia de la Asociación de los conventos asiáticos que se desarrolló en la arquidiócesis de Saigón (Ho Chi Minh City) y se reunió con obispos, sacerdotes y religiosos de todo el país.
A su arribo al país, cientos de personas consagradas dieron la bienvenida al Card. Braz de Aviz en la diócesis de Xuân Lộc (provincia de Đồng Nai). Al día siguiente, en la sede episcopal de Saigón él se reunió con el Card. Jean-Baptiste Pham Minh Mẫn, arzobispo emérito, y con el clero de la arquidiócesis. Por la tarde, el cardenal se dirigió al Centro pastoral diocesano y ofició una misa en memoria de los mártires de Vietnam, cuyo Jubileo especial se celebra este año en la Iglesia.
En la mañana del 4 de septiembre, en el mismo Centro pastoral, se dio inicio a la Conferencia de la Asociación de conventos asiáticos. Dirigiéndose a los participantes, el Card. Braz de Aviz afirmó: “Ustedes y yo hemos recibido el don de una vida y de una misión cristiana. Juntos, somos llamados a recibir el Espíritu Santo y a proclamar la Buena Noticia a todos. Para mí es muy importante visitar los lugares donde viven ustedes, y llevarles las bendiciones del Santo Padre”.
Luego el cardenal hizo una visita al seminario mayor de San José y a las religiosas de la Comunidad de hermanas vietnamitas de San Pablo. “No podemos ser ingenuos, pensando que el viaje para seguir a Dios es fácil’. ¡Veo tanta vitalidad en la vocación aquí! En mi vida he visto tantas jóvenes siguiendo a Dios como hermanas –afirmó, durante el coloquio con las religiosas- . Sigamos el camino de Dios. Éste es un viaje especial. Entreguémonos a Jesús para alcanzar el fin de su mor. Ésta es la única razón de la vida consagrada”.
Al día siguiente, el prelado se trasladó a Huế (provincia de Thừa Thiên–Huế). Allí se llevó a cabo una sesión de trabajo con los representantes de la arquidiócesis local y de otras nueve circunscripciones, antes de reunirse con la Asociación de religiosas y celebrar misa en la catedral de Phủ Cam. En Huế, el cardenal afirmó que “el Santo Padre Francisco siempre tiene en mente a las personas consagradas”. “Son el tesoro de la Iglesia –reafirmó-. Los religiosos son siempre fieles y viven en la gracia de la orden o de la congregación. No dejen de tratar de mejorar. El entrenamiento de la vida religiosa es racional y consciente, y de esta manera, la consciencia se trasladará a su corazones”.
El 6 de septiembre, en Hanói, el Card. Braz de Aviv mantuvo un diálogo con el Card. Peter Nguyễn Văn Nhơn, arzobispo de la capital, y cientos de sacerdotes además de 500 religiosas y religiosos. Él expresó su gratitud a los 117 mártires de Vietnam por “la vitalidad y la juventud que caracterizan el rostro de la Iglesia local”.
Al día siguiente, en la última escala del viaje, la delegación vaticana realizó una visita a Vũ Chiến Thắng, responsable del Comité gubernamental de Asuntos religiosos (foto 2). Al recibir al cardenal, el funcionario destacó que “en los últimos años, las relaciones entre la Iglesia católica y el gobierno vietnamita han sido cada vez más estrechas”. “Compartimos [nuestros puntos de vista] y dialogamos para descubrir semejanzas y denominadores comunes, a fin de construir la Iglesia, la sociedad y el desarrollo del país –afirmó-. El gobierno vietnamita aprecia mucho la labor de numerosas religiosas y personas consagradas (hombres y mujeres). Ellos han contribuido activamente prestando servicios de asistencia en las áreas de salud, educación y desarrollando actividades sociales o de beneficencia”.
14/12/2015
26/11/2016 13:56