Gojra, musulmanes matan a un cristiano que trató de impedir que acosaran a su hermana
Arif Masih, de 32 años, fue golpeado, secuestrado, envenenado y luego abandonado en plena calle. Pese a que hubo denuncias y testigos, la policía no detuvo a los culpables. En señal de protesta, los padres de Arif colocaron el cadáver en medio del tráfico para pedir solidaridad. Baba Intizar Gill: Es urgente proteger a las minorías religiosas y concederles la ciudadanía plena.
Gojra (AsiaNews) – Arif Masih, de 32 años, fue asesinado por un grupo de musulmanes por intentar defender a su hermana del acoso de dos jóvenes musulmanes. Pocos días antes, los dos jóvenes habían arrastrado a la joven a la calle y le habían arrancado la ropa. Ante la insensibilidad de la policía y del gobierno, los padres de Arif expusieron el cuerpo de su hijo en plena calle, pidiendo solidaridad y justicia a los transeúntes y a los vehículos.
Arif Masih es hijo de Saleem Masih y vivía en el pueblo Chak 370 de Tariqabad (Gojra, Punjab). Según su hermano, Rizwan Masih, el incidente comenzó el 20 de mayo. Su hermana, Rehana Bibi, de 18 años, había ido al mercado a comprar leche. De camino a casa, dos jóvenes, Muhammad Tariq y Muhammad Majid, empezaron a acosarla. La muchacha intentó escapar y se refugió en su casa. Los dos hombres irrumpieron en la casa, tuvieron un altercado con Arif y se enzarzaron en una pelea. Luego tomaron a la joven y la arrastraron hasta el mercado, le rasgaron la ropa y se burlaron de ella.
Toba Tek Singh Rana Umar Farooq, un policía del distrito, ordenó presentar una denuncia. Arif radicó la denuncia (first information report # 506/ 2021) contra Muhammad Tariq y Muhammad Majid, citando el artículo 354-A, que castiga a "todo aquel que agreda o haga uso de la fuerza criminal contra una mujer y rasgue su ropa, y en ese estado la exponga al público". Si bien la denuncia se presentó el mismo 20 de mayo, nadie fue arrestado.
Desde entonces, los acusados comenzaron a amenazar a Arif con las peores consecuencias si no retiraba la denuncia.
Según varios testigos, el 23 de mayo los dos culpables fueron a la casa de Arif y abusaron de él. Lo cargaron en su moto y luego lo golpearon y envenenaron, para luego arrojarlo a la calle. Los habitantes de la zona informaron a la familia de que su hijo yacía inmóvil en la carretera. En estado crítico, Arif fue trasladado primero al Tehsil Headquarters Hospital de Gojra; tras los primeros auxilios, fue trasladado al Hospital Allied de Faisalabad. Pero debido a sus heridas y al veneno, murió.
Ayer, 24 de mayo, en señal de protesta, la familia tomó el cuerpo de Arif y lo expuso en Samundri Road (en Faisalabad). Pararon los vehículos, exigiendo justicia al jefe de Gabinete de Punjab, Sardar Usman Bazdar; al inspector general de Punjab, Inam Ghani; al oficial de policía regional, Raja Rifat Mukhtar, y a otras personas.
El activista de derechos humanos Baba Intizar Gill, presidente del partido Aqliyat-e-tahafuz, condenó el incidente y exigió justicia para la familia. "El gobierno debe tomar medidas rápidas contra los culpables y proteger los derechos de las minorías, considerándolas ciudadanos de pleno derecho", dijo. “Estos incidentes contra las minorías religiosas no son nuevos en nuestra nación, pero desgraciadamente el gobierno nunca toma medidas firmes contra los culpables. Es doloroso ver que hasta el momento, ninguno de los culpables ha sido arrestado".