Fronteras marítimas: para Beirut (y Washington) es un acuerdo 'histórico' con Israel
El presidente Michel Aoun comunicó con satisfacción la firma del acuerdo que debería poner fin a las disputas territoriales. Está en juego la explotación de dos enormes yacimientos en el Mediterráneo oriental: para el Líbano queda el de Cana. No tendrá fuerza de tratado, pero se formalizará ante la ONU. La disconformidad de una (pequeña) parte del Parlamento libanés.
Beirut (AsiaNews) – “Histórico”. Así lo calificó anoche el presidente libanés Michel Aoun, cuyo comentario se difundió después que el de su homólogo estadounidense, Joe Biden, y el del primer ministro israelí, Yaïr Lapid, en referencia al acuerdo que acaban de alcanzar el país de los cedros e Israel sobre la delimitación de las fronteras marítimas. “Anuncio la aprobación -dijo Aoun en un discurso televisado- por parte del Líbano de la versión final redactada por el mediador estadounidense, para delimitar las fronteras marítimas del sur”.
“Este acuerdo indirecto”, al que definió como un “éxito histórico”, responde -siguió diciendo- a las “reivindicaciones de los libaneses y preserva plenamente nuestros derechos”. Luego afirmó que el Líbano ha obtenido "todo el yacimiento de Caná", sin que Beirut tenga que pagar "ninguna compensación" a la otra parte.
El uso del mismo adjetivo por parte del Líbano e Israel consagra en cierta forma los extraordinarios esfuerzos realizados por Estados Unidos, y por el propio Amos Hochstein, para alcanzar un acuerdo sin perdedores (win-win) y cerrar el paso a cualquier forma de impugnación. El peligro provenía de los bloques de ultras de ambos frentes, hostiles a alcanzar un pacto común con el propósito de que prevalecieran los intereses de una facción.
En una entrevista concedida anoche al canal libanés LBC, Hochstein consideró que un acuerdo de este tipo tendría "el mérito de prevenir el caos y más conflictos en toda la región". El acuerdo garantizará "la prosperidad económica para el Líbano [...] y una consolidación de las fronteras al norte de Israel, que quedan reforzadas, eliminando de esa manera la posibilidad de una guerra entre Israel y el Líbano", explicó el mediador estadounidense.
El anuncio quedó respaldado por la llegada al Líbano de Laurent Vivier, director del sector de gas del gigante francés Total, con la misión de explorar el yacimiento de Cana. Vivier fue recibido por el primer ministro Nagib Mikati, quien le pidió que comenzara sin demora los trabajos de exploración. El 12 de octubre el presidente estadounidense Joe Biden ya había llamado a su homólogo libanés Aoun y al primer ministro israelí Yaïr Lapid para felicitarlos por haber alcanzado un acuerdo que definió como "un avance histórico".
Ha sido una carrera contrarreloj pocas veces vista en la historia de la diplomacia, en la que el mediador estadounidense puso todo su empeño para alcanzar un plan aceptable para ambas partes antes de las elecciones parlamentarias en el Estado judío, previstas para el 1 de noviembre. En Israel el texto fue aprobado por el gabinete de seguridad y el gobierno, y remitido para su consideración a la Knesset, el parlamento israelí.
Para no dar fuerza de tratado al acuerdo y ser acusado de normalizar las relaciones con Israel, Líbano se contentará con hacerlo firmar en Ras Nakoura, bajo la supervisión de la misión de la ONU (Unifil) y funcionarios de Washington, y luego homologarlo en el Glass Building de Nueva York. Sin embargo, dos parlamentarios se opusieron a este procedimiento y pidieron que se divulgara y fuera revisado por el Parlamento, porque tanto Líbano como Israel hacen hincapié en su capacidad para estabilizar la zona fronteriza (en disputa) entre ambos países.
El acuerdo también especifica que con respecto a la parte del yacimiento de Cana en aguas territoriales israelíes, el país recibirá una compensación pagada directamente por el operador Total. La suma procederá exclusivamente de las regalías que reciba el gigante petrolero. Por último, con respecto a la llamada "línea de boyas", el pacto estipula que la zona que delimita, así como las fronteras terrestres entre Líbano e Israel, se discutirán independientemente de las fronteras marítimas, y cada país se mantiene provisoriamente en sus actuales posiciones.
10/10/2022 11:43