Feria del libro en Dacca: estrechos controles sobre las ofensas al sentimiento religioso
La Feria “Amar Akushey” inaugurada hoy por la Premier, Sheikh Hasina. Febrero es considerado el “mes de la lengua”. La manifestación dura un mes y para la ocasión se publican miles de nuevos volúmenes. Policías de civil se mueven entre los stands para vigilar que haya respeto por las religiones.
Dacca (AsiaNews)- Se inauguró hoy en Dacca la edición 2017 de la feria del libro “Amar Ekushey”. Los stands, que serán accesibles por todo el mes de febrero, fueron inaugurados por la Premier de Bangladesh, Sheikh Hasina. Además de las fuerzas distribuidas para garantizar la seguridad de la manifestación, Asaduzzaman Mia, comisario de policía de la capital, anunció que entre los puestos estarán presentes también policía de civil. La tarea de ellos será vigilar que los volúmenes expuestos no contengan ofensas al sentimiento religioso de toda la población.
Como cada año, la Feria se desarrolla en los locales de la Bangla Academy y en el lugar del memorial nacional “Suhrawardy Udyan”. Se trata de uno de los eventos más famosos en el país, dedicado a los mártires muertos el 21 de febrero de 1952 mientras protestaban para pedir que el bengalí se lo eligiese como lengua nacional en el ex Pakistán oriental. Por esto febrero se lo considera como el “mes de la lengua”.
La orden de aplicar mayores controles sobre los libros deriva del incremento del radicalismo islámico, que en los meses pasados llevó a la masacre de Dacca, la más sanguinaria de la reciente historia del país. En el año 2016, los fundamentalistas han atacado a numerosos exponentes de las minorías, blogueros y libres pensadores.
La feria hospeda a 663 stands, dados en concesión a 409 casas editoriales. Para la ocasión, se imprimieron miles de nuevas ediciones. El comisario declaró que la “responsabilidad principal recae sobre los autores y los editores, que deben controlar sus libros, para que éstos no contengan comentarios ofensivos. Después la Bangla Academy, organizadora de la Feria, debe controlar los textos”.
Frente al riesgo que tal control pueda ser de obstáculo a las publicaciones, el funcionario replica: “Nosotros creemos en la libertad de pensamiento. Si alguien comete ultrajes a la religión de otra persona e instiga a la violencia sectaria, no se coloca más en la categoría del libre pensamiento”.
El año pasado las autoridades han clausurado una editorial que había puesto en venta un texto que contenía insultos contra el islam. Un editor musulmán afirma: “Estamos conscientes sobre los controles. En base también de las pasadas experiencias, antes de enviar a la impresión releemos los libros palabras por palabra. Bangladesh es un país islámico conservador, debemos obedecer a las leyes del país y respetar la religión de los otros”.
17/12/2016 13:14