Ereván entre Francia y Rusia

de Vladimir Rozanskij

La visita a Armenia de Stéphane Séjourné, ministro saliente del Gobierno francés y candidato a comisario europeo, fue vista con recelo en Moscú, que pretende mantener fuertes sus lazos históricos. Mientras, en Ereván, los «socios menores» de la coalición de Pašinyan recogen firmas para un referéndum sobre la entrada del país en la UE.

Ereván (AsiaNews) - El ministro saliente de Asuntos Exteriores de Francia, Stéphane Séjourné, candidato a comisario de la UE, ha visitado Ereván en los últimos días, provocando reacciones muy críticas por parte de Rusia, que ve en el «nuevo idilio» entre Armenia y Francia un intento de sustituir la histórica asociación con el Kremlin. El director científico del Instituto de Investigación Internacional Mgimo, la escuela de diplomáticos de Moscú, Sergej Markedonov, comentó la situación en un extenso artículo en el canal de Telegram Bunin&Co.

Según el experto, «los encuentros entre armenios y franceses se han intensificado tanto que ya no sorprenden a nadie, se han convertido en una rutina diplomática». Por otra parte, los franceses también mantienen relaciones frecuentes con Azerbaiyán, manteniendo «un tono constante de lucha retórica», defendiendo los derechos de los armenios en relación con la situación de Nagorno Karabaj, pero luego abordando los temas más variados. Más bien, los armenios intentan acreditar la tesis de que París se está convirtiendo en el aliado más importante de Ereván, y en un actor decisivo en toda la zona del Cáucaso Sur.

La visita de Séjourné, sin embargo, tiene un carácter más específico, según Markedonov, al que hay que prestar más atención. Por un lado, considera el viaje como una «gira de despedida» antes de trasladarse a Bruselas en el gobierno de Ursula von der Leyen, donde sustituirá al dimisionario Thierry Breton. Después de Armenia, el ministro francés viajó a Chişinău y Atenas, y también ha estado en Moldavia con frecuencia en los últimos años, teniendo en cuenta la inminencia de las elecciones presidenciales y el referéndum para la integración europea. Grecia es también un socio de Francia desde hace mucho tiempo, como contrapeso a los intereses de Turquía en la región, y las relaciones de los griegos con Armenia se han desarrollado mucho en los dos últimos años.

Por otra parte, señala el director de la diplomacia rusa, «no hay que olvidar las iniciativas políticas internas de Armenia, que tienen importancia internacional». La posibilidad de que el país ingrese en la UE se debate desde junio, por iniciativa de la «Plataforma de Fuerzas Democráticas», a la que se han unido «todos los occidentalistas armenios», como Aram Sarkisyan, líder del partido «República», Arman Babadžanyan, del movimiento «En nombre de la República», Tigran Khzmalyan, del «Partido Europeo de Armenia», los llamados «socios menores» del primer ministro Nikol Pašinyan.

Según los opositores del primer ministro, estos grupos son maniobras de Pašinyan para poner a prueba a la opinión pública y propagar ideas que, por diversas razones, no quiere atribuirse a sí mismo ni a su propio círculo. En efecto, el propio Pašinyan ha expresado en público opiniones críticas sobre la posible entrada de Armenia en la UE, señala Markedonov, pero «el tiempo apremia, y desde septiembre estamos recogiendo firmas para organizar un referéndum sobre la cuestión», una campaña que se prolongará hasta el 14 de noviembre con el objetivo de llevar la propuesta al Parlamento, para lo que se necesitan al menos 50.000 firmas, y «obviamente París apoya plenamente esta iniciativa».

El politólogo observa que en las condiciones actuales, en las que se están reformando muchos planteamientos típicos de la «guerra fría», la cuestión de las relaciones de Armenia con Europa debe verse en el contexto del conflicto mundial, y por eso «Séjourné en Ereván mencionó a Rusia, señalándola como el principal obstáculo en el camino hacia la democratización y la integración europea de Armenia, asegurando que Francia siempre estará al lado del pueblo armenio». El apoyo francés parece en muchos aspectos más retórico que concreto, como en las declaraciones del propio Emmanuel Macron y otros miembros del Gobierno de París, mientras que «Moscú se mantiene al margen, tratando de mantener todos sus lazos históricos en el Cáucaso».

Foto: homenaje de la delegación al memorial de Musa Dagh en Ereván. Foto tomada del perfil X de Stéphane Séjourné