Erdogan, una campaña electoral dirigida al Islam y el nacionalismo

Como jefe de Estado tiene una prohibición constitucional para participar en la campaña electoral, pero ha celebrado mítines por todo el país y se ha dirigido a los turcos musulmanes conservadores. Al final de una manifestación en Estambul, de uno de los minaretes de Santa Sofía - que es un museo - vino el llamado musulmán a la oración.

Estambul (AsiaNews) - A medida que la campaña electoral ha entrado en su última semana y concluirá con una votación que será decisiva para su proyecto de transformar a Turquía en una república presidencial, el Presidente, Recep Tayyip Erdogan, está apuntando con sus cartas sobre la religión y sobre otomanismo, como sentimiento nacional.

"No vamos a dar espacio a los que hablan en contra de nuestra llamada a la oración", dijo el 30 de mayo en un discurso en Estambul para la celebración del aniversario de la conquista de Constantinopla por los otomanos en 1453. Y agregó "no daremos espacio a aquellos que quieren apagar el fuego de la conquista". Para escucharlo una gran multitud agitando banderas nacionales y con la mayoría de las mujeres cubiertas por el velo islámico.

Así para simbolizar la opción nacionalista y religiosa, para cerrar la manifestación desde uno de los minaretes de Santa Sofía llegó el llamado musulmán a la oración. Sofía, lo que una vez fue el mayor catedral cristiana de Oriente, es ahora un museo que la corriente más conservadora del Islam turco le gustaría que volviera a ser una mezquita, como durante el Imperio Otomano. Y Erdogan se ha mostrado abierto a la solicitud.

Erdogan - quien como jefe de Estado tiene una prohibición constitucional a participar en la campaña electoral - ha celebrado mítines por todo el país dirigidos a turcos musulmanes conservadores que por décadas, durante el gobierno de los partidos laicos, se sentían tratados como ciudadanos de segunda clase. La vieja élite secular dijo: "Ellos beben su whisky en el Bósforo... y desprecian al resto de las personas".

Para tener en cuenta, por último, que con el fin de tener una gran multitud en su manifestación el 30 de mayo, Erdogan también ha aplazado por un día del aniversario de la toma de Constantinopla, que es 29, pero 30 era Domingo... No era la primera vez que el presidente mueve la historia turca. El 25 de abril, Turquía conmemora la campaña de Gallipoli de 1915. Pero este año Erdogan lo hizo un día antes del aniversario, que se celebra el 24 de abril, el mismo día en que en muchos países se hace una reminiscencia del genocidio armenio.