En Manila, Duterte se dirige a su hijo: ‘Si eres culpable, estás muerto”
Pablo Duterte está acusado de asociación ilícita y tráfico de drogas. El joven político niega haber introducido metanfetaminas en el país, por un valor de 120 millones de euros. Diputados de la oposición afirman que el presidente y su familia ya hace tiempo que están implicados en actividades ilícitas.
Manila (AsiaNews/Agencias) – “Si tengo hijos que estén involucrados en las drogas, mátenlos. Así la gente no tendrá nada que objetar”. El presidente filipino Rodrigo Duterte defiende su reputación de hombre de hierro inflexible y declara que mataría a su hijo en caso de que las acusaciones por tráfico de drogas que se le dirigen resultasen ser fundadas, a la vez que promete inmunidad a los policías encargados de su homicidio.
Pablo Duterte, de 42 años de edad e intendente de Davao, este mes fue removido por una comisión del Senado (foto) tras negar su involucramiento en una organización criminal china que introdujo en el país metanfetaminas provenientes de China, por un valor de aproximadamente 120 millones de euros. “Le he dicho a Pulong [apodo de Pablo]: ‘Mi orden es matarte, si llegas a ser arrestado. Protegeré a la policía que se ocupe de matarte, si esto es verdad’”, ha dicho el presidente en un discurso pronunciado ayer en el palacio presidencial.
Algunos diputados de la oposición y otros críticos de Duterte afirman que tanto él como su familia llevan más de dos décadas involucrados en actividades ilícitas, que se remontan a la época en que el presidente se desempeñaba como intendente de la ciudad meridional de Davao. El senador Trillanes ha declarado que posee información, brindada por servicios de inteligencia de un país extranjero, que dejaría a Pablo Duterte al descubierto.
El año pasado, Rodrigo Duterte, de 72 años de edad, ganó las elecciones presidenciales, prometiendo que emprendería una campaña sin precedentes para eliminar de la sociedad las drogas ilegales, y se abocó al homicidio de más de 100.000 despachantes de droga y tóxico-dependientes. Desde que asumió el cargo, la policía refiere que ha dado muerte a más de 3.800 personas en circunstancias inexplicables. Los activistas por los derechos humanos afirman, sin embargo, que los homicidios extra-judiciales ya han segado cerca de 12.000 víctimas. Como presidente, Duterte ha declarado que está “feliz de matar” a tres millones de drogadictos y ha definido como “daño colateral” el fusilamiento de niños perpetrado en la guerra contra la droga.
05/07/2019 11:14