Elon Musk a la conquista del mercado chino. El lastre de los grandes 'zombies' del Estado
El año pasado Tesla vendió 114.000 autos eléctricos en China. Sin embargo, las startups chinas del sector están creciendo. Problemas de las grandes empresas del Estado, cada vez más endeudadas. La deuda de Beijing alcanza el 275% del PIB. Las exportaciones están creciendo, pero disminuirán sin los estímulos del gobierno para la emergencia del Covid-19.
Beijing (AsiaNews) - Los autos eléctricos del gigante estadounidense Tesla están invadiendo el mercado chino. Según la China Passenger Car Association, en los primeros 11 meses de 2020 el grupo del magnate Elon Mask vendió 114.000 vehículos de nueva generación en China. Las perspectivas para el nuevo año son aún mejores, dado que Tesla ha reducido un 30% el precio del modelo que se produce en Shanghai, que ahora ronda los 340 mil yuanes (43 mil euros).
En comparación con los competidores chinos, los automóviles Tesla están demostrando ser más competitivos y equipados con mejor tecnología. No obstante, en los últimos meses las tres startups chinas del sector -Nio Inc., XPeng Inc. y Li Auto Inc.- han registrado fuertes ventas. El problema es que el gobierno parece orientado a retirar los subsidios que favorecieron su expansión.
Los vehículos eléctricos chinos cubren el 10% del mercado mundial. Los analistas de UBS Securities estiman que para 2030 alcanzarán casi el 50%. El propio Musk considera que las fábricas de automóviles chinas son la principal competencia de Tesla.
El crecimiento de las empresas de alta tecnología en China contrasta con las dificultades de las empresas del Estado tradicionales, que tienen serios problemas de endeudamiento. En 2020 no pudieron pagar deudas por 71.800 millones de yuanes (9.000 millones de euros), en su mayoría derivadas de bonos vencidos. Estos pasivos se descargan en las cuentas del Estado. Según los cálculos de la Academia China de Ciencias Sociales, la deuda nacional ha subido al 275% del PIB: el año pasado rondaba el 245%.
Las empresas chinas del Estado siguen siendo una piedra angular de la política económica del presidente Xi Jinping. Sin embargo, muchos observadores las consideran "zombis" no competitivos, que dependen de los estímulos del gobierno, como los proporcionados el año pasado para combatir la pandemia. Su incumplimiento constituye una amenaza para el sector crediticio del país y, en consecuencia, para la recuperación económica. Varios expertos predicen que los efectos positivos de los recortes de impuestos y las inversiones públicas, que se adoptaron para superar la crisis pandémica, se desvanecerán en los próximos meses. Esto es especialmente cierto para las exportaciones, que en diciembre registraron un crecimiento anual del 18,1%: significativo, pero inferior al 21,1% del mes anterior.
17/12/2016 13:14