El wahabismo, el terrorismo y las 'confesiones' del príncipe saudita

de Kamel Abderrahmani

Durante la Guerra fría, Arabia Saudita difundió el wahabismo y el terrorismo “a pedido” de los aliados occidentales para contrastar a los soviéticos. Se cometió el mismo error en los gobiernos sauditas sucesivos. El reino no financia el terrorismo, sino que los fondos llegan de institutos privados. Las reflexiones de un joven musulmán.

París (AsiaNews)- ¡Es una confesión sorprendente! El príncipe heredero saudita, Mohammed Bin Salman, acaba de admitir algo inédito, reconociendo oficialmente el rol maléfico desarrollado por su país, responsable de la difusión del extremismo religioso en el mundo.

Cuando visitaba el pasado 24 de marzo los EEUU, el actual hombre fuerte de Riad afirmó que el reino propagó el germen del wahabismo por indicación de los occidentales durante la Guerra fría. El objetivo de este pedido de los aliados occidentales era contrastar la Unión Soviética (URSS) de aquel entonces e impedir que “conquistase el mundo musulmán y adquiriese influencia".

De hecho, en una entrevista concedida al diario americano The Washington Post, publicada el 25 de marzo pasado, Mohammed Bin Salman, multiplicó las confesiones. Más allá de la difusión del wahabismo, que es la matriz del terrorismo internacional, el príncipe heredero reconoce también “los sucesivos errores de los gobiernos sauditas que -dice- fueron desviados sobre falsas pistas”. “Ahora es tiempo de que las cosas vuelvan a la normalidad”, declaró. Pero Mohammed Bin Salman, intenta también deslindar a su país de la acusación de financiar directamente el terrorismo. “Tal financiación proviene, actualmente,en gran parte, de instituciones privadas que tienen su base en el reino, pero que no son del gobierno”, se justificó.

La pregunta que me planteo hoy es: Después de haber contaminado las mentes de un gran número de musulmanes enseñándoles el odio y el terrorismo, ¿cómo podrá convencerlos ahora de que todo estaba equivocado, que lo que les habían inculcado era falso y que estaba en contradicción con el islam del Corán? Dudas que resultan legítimas, sobre todo, después de la polémica desatada la semana pasada en Argelia. Uno de los representantes de este movimiento, en este caso Mohamed Ali Ferkous, quedó en el centro de una seria controversia después de sus observaciones peligrosas y graves sobre el “sunismo”. Según él, sólo el salafismo forma parte de la suna (costumbres islámicas, ndr), mientras que “otras corrientes no”. Y desafortunadamente, estos extremistas son tolerados y alentados en Argelia.