El retorno de Ichkeria al Cáucaso ruso: el separatismo checheno, una amenaza para Putin

de Vladimir Rozanskij

Reaparecen los defensores de la independencia de Chechenia, reprimida por Putin hace 20 años. El líder local, Kadyrov, podría aprovechar la ocasión y sumarse al movimiento si el Kremlin continúa ignorándolo. Un batallón independentista checheno lucha contra los rusos en Ucrania.

Moscú (AsiaNews) - En el centro de Grozni, capital de la república rusa de Chechenia, en el Cáucaso norte, aparecieron pancartas y videos en la avenida Kadyrov dedicados al "fundador de la patria" Akhmat, padre del actual presidente Ramzan. Las inscripciones y los rostros sobre fondo rojo oscuro ensalzan a los representantes de la "intelligentsija Vajnakhskskaja", los partidarios de la independencia de Ichkeria, el Estado checheno-ingusetio por el que se libró la larga guerra civil del poscomunismo.

Los vainajs eran aquellas tribus asentadas en las regiones del Cáucaso que dieron origen al actual pueblo checheno, a la etnia ingusetia y a otras de la región, según una definición surgida entre los etnógrafos a principios del siglo XX. Con este término se pretendía indicar a los portadores de las antiguas lenguas derivadas de la "Nakhskaya", una reinterpretación de las raíces un tanto oscuras de los pueblos de esta antigua y multiforme zona en la frontera entre Europa y Asia.

La pantalla de carteles de propaganda muestra imágenes de un escritor de los años 70, Abuzar Ajdamirov -autor del himno de Ichkeria- y del héroe de la guerra civil Jusup Temirkhanov, condenado por el asesinato del comandante ruso Jurij Budanov, que había secuestrado y asesinado a una joven chechena de 18 años Elza Kungaeva. También aparecen el cirujano Khasan Baiev, muy activo durante el conflicto, y el cantor de la independencia chechena, el escritor Abdurakhman Avtorkhanov.

El primero en difundir las imágenes en Facebook fue el famoso empresario Juni Uspanov, conocido por algunos como "el cocinero de Kadýrov", el propietario de restaurantes que fue distinguido con el título de "héroe civil" en 2011. Sus locales, repartidos por todo el Cáucaso, son famosos no solo por sus deliciosos platos, sino también por las exposiciones que los convierten en verdaderos museos de la historia de los pueblos caucásicos, e incluso los interiores están siempre decorados siguiendo el estilo local.

La evocación de los independentistas de Ichkeria resulta provocadora en el contexto de la guerra de Ucrania. El presidente checheno es uno de los principales partidarios y animadores del conflicto y aunque concuerda con el otro famoso belicista, el "cocinero de Putin", Evgenij Prigožin, también compite con él. Este último parece dispuesto a presentarse como adversario de Putin en las elecciones presidenciales de 2024. Kadyrov, por su parte, ya ha insinuado que si Rusia no le da el espacio político que merece, podría cambiar de rumbo y volver a apostar al separatismo.

En cuanto a las figuras evocadas en las imágenes exhibidas en Grozni, Avtorjánov fue el gran disidente de la era soviética durante la Segunda Guerra Mundial. Para apoyar la causa de la independencia de Ichkeria, decidiór apoyar al régimen nazi en Alemania, con motivos similares a los del héroe independentista ucraniano Stepán Bandera. La "desnazificación de Ucrania", el motivo que empujó a Putin a invadir el país, se refería precisamente a estas tendencias, que ahora parecen reproducirse en el lado caucásico.

El cirujano Baiev salvó la vida de uno de los líderes de la guerra chechena contra los rusos, el comandante Šamil Basaev, amputándole la pierna directamente sobre el terreno. Después fue perseguido tanto por los combatientes chechenos como por las fuerzas federales de Putin, y aún vive y trabaja en Grozni.

Hasta ahora, los partidarios del renacimiento de Ichkeria se han alineado contra Kadyrov: lo acusan de apoyar el imperialismo bélico de Putin, e incluso lanzaron una yihad contra el presidente checheno en el verano de 2022. Anzor Maskhadov -hijo de Aslan, el ex presidente de Ichkeria- lidera el batallón de chechenos que lucha del lado de Ucrania. Su objetivo es lograr la "desocupación e independencia" de Chechenia, suprimida por Putin a principios de la década de 2000, la primera gran operación político-militar del líder del Kremlin.

La Verjovnaja Rada, el Parlamento de Kiev, aprobó en octubre una declaración por la cual reconoce a Chechenia como "territorio temporalmente ocupado por Rusia", país al que acusa de "genocidio del pueblo checheno". El desenlace de la guerra podría provocar profundos cambios en una región habituada a sufrir frecuentes terremotos, que podrían llegar a sentirse en Moscú y Kiev - y quizás, incluso en Washington y Beijing.