El patriarca Sako felicitó a los primeros graduados de la Universidad Católica de Erbil

La universidad, que contó con el decidido apoyo del arzobispo Mons. Warda, fue inaugurada a fines de 2015 bajo la amenaza del ISIS. Durante el acto se proyectaron videos con entrevistas a jóvenes estudiantes, en las que cuentan sus sueños y aspiraciones. Primado caldeo: la universidad es "un lugar maravilloso para la cultura, la educación y el diálogo".

Erbil (AsiaNews) - "Esta universidad es un lugar maravilloso para la cultura, la educación y el diálogo, y por eso hay que apoyarla", afirmó el patriarca caldeo, cardenal Louis Raphael Sako, en la solemne ceremonia de graduación del primer grupo de jóvenes que completaron su plan de estudios en la Universidad Católica de Erbil, en el Kurdistán iraquí. La universidad abrió sus puertas a fines de 2015, cuando gran parte de Irak estaba bajo la amenaza del Estado Islámico (EI, antes Isis), que había elegido Mosul como su bastión, a unas decenas de kilómetros de la frontera con la región autónoma. "En mi nombre y en nombre de la Iglesia caldea - prosiguió el primado - deseo expresar mi más sincera felicitación a la diócesis de Erbil, a su arzobispo, a la ciudad de Ankawa, al cuerpo de profesores y al primer grupo de graduados".

La ceremonia (ver foto), enriquecida con una presentación musical, tuvo lugar ayer en los jardines de la universidad, en Ankawa. Al acto asistieron numerosas personalidades religiosas y civiles, intelectuales, políticos, el patriarca de la Iglesia Asiria de Oriente Mar Awa III, el nuncio apostólico en Irak, obispos, religiosas, sacerdotes y familiares de los estudiantes. Hablaron también el hijo del presidente de la región autónoma kurda Idris Barzani, algunos ministros y académicos, así como el fundador de la universidad, Mons. Bashar Warda.

En la proyección de dos filmaciones realizadas previamente, los asistentes pudieron escuchar el testimonio de algunos alumnos del ateneo, sus sueños y sus aspiraciones, en una realidad que no siempre ha favorecido sus estudios. “La Iglesia Católica - dijo el cardenal Sako.- se ha distinguido desde los primeros siglos por sus instituciones culturales y sociales: escuelas, universidades, obras de beneficencia para los pobres, hospitales y centros de salud gratuitos”.

Tanto la Universidades católica como el Hospital Maryamana, que también se encuentra en Erbil, son "proyectos vitales" que refuerzan el rol y la presencia de la Iglesia en la sociedad. En los últimos días se ha inaugurado un centro para el tratamiento del autismo en Kirkuk y se colocó la primera piedra del Centro Thalassima; también está casi terminada una instalación para pacientes con Alzheimer en Sulaymaniyah. Estas iniciativas sociales, culturales, educativas y para la salud "preparan un futuro de convivencia" en el país, observó el cardenal, y brindan oportunidades de conocimiento, intercambio de experiencias y también nos permiten prepararnos para los desafíos del futuro.

Con respecto a las escuelas, el primado caldeo espera que se ofrezca "educación religiosa" a todos los alumnos y que no solo sea cristiana o musulmana, sino que abrace las diferentes religiones para que los estudiantes "puedan conocer lo que tienen en común y evitar el extremismo". Hoy, continuó, hay dos "tendencias" entre los fieles de las religiones. La primera es una visión intransigente y radical, que no admite revisiones respecto a un pasado inmutable. La segunda lee las religiones "en profundidad" y busca su "esencia" o mensaje, sin perder su "vitalidad e impulso", especialmente en esta era "digital". Porque la religión "juega un papel importante" en los asuntos públicos y "no puede limitarse a los ritos y al culto". La tarea de las religiones "es servir a las personas" preservando su libertad y dignidad, concluyó el cardenal, y como insiste el Papa Francisco "la fraternidad humana y la fe en Dios, centro de todas las religiones, deben unirnos" respetando "la diversidad y el pluralismo".

(Foto, página web del Patriarcado Caldeo)