08/11/2024, 13.59
INDONESIA
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El obispo de la zona del volcán: 'Lewotobi era un símbolo de armonía, ahora necesitamos solidaridad'

de mons. Fransiskus Kopong Kung *

Desde la isla de Flores, donde 10 personas perdieron la vida en la erupción del 3 de noviembre y otras miles han sido desplazadas por los fenómenos que continúan, llega el mensaje de Mons. Kopong Kung: "Es una montaña maravillosa formada por dos picos que la gente local llama 'el marido' y 'la esposa'. La destrucción es grave, hemos quedado profundamente afectados". Todas las comunidades católicas de Indonesia se han movilizado y están recaudando fondos.

Yakarta (AsiaNews)- La situación en la isla de Flores sigue siendo muy grave como consecuencia de la erupción del volcán del monte Lewotobi el domingo pasado, que causó la muerte de 10 personas. Los fenómenos continúan y han obligado a miles de personas a abandonar sus hogares. Las comunidades católicas de todo el país se han movilizado en solidaridad con esta emergencia. "Por el momento nos estamos concentrando en proporcionar artículos de primera necesidad a cerca de 1.000 supervivientes", dice a AsiaNews Eko Sugiyanto, de Cáritas Indonesia, que en pocos días ya ha recaudado más de 1.000 millones de rupias (unos 60.000 euros ndr.). Todavía hay alrededor de 4.000 personas que no han encontrado refugio, y por eso será necesario poner en marcha un programa de reconstrucción cuando haya pasado completamente la siguiente ola de cenizas. Publicamos a continuación el llamado a la solidaridad dirigido a los católicos de Indonesia por el obispo de Larantuka - la diócesis local - donde cuenta la singular historia del monte Lewotobi.

Mi nombre es Fransiskus Kopong Kung, soy el obispo de la diócesis de Larantuka, en la isla de Flores de Indonesia. Quiero compartir con ustedes una breve historia y mi reflexión sobre la erupción de la montaña volcánica Lewotobi, que se encuentra en nuestra diócesis. Y hacer un llamamiento para ayudar a las personas que sufren y han sido afectadas por esta erupción.

Lewotobi, una montaña maravillosa

Ubicada en la parte oriental de la isla de Flores, Lewotobi es una montaña maravillosa. Encierra un mensaje y valores muy profundos y significativos para nuestra vida. Esta montaña volcánica se eleva, de hecho, como una pareja de dos cimas, como si fueran marido y mujer.

La población local llama a esta pareja “laki-laki” (varón/marido) y “perempuan” (mujer/esposa). Esto es muy interesante: tienen la sabiduría local de tratar a esta montaña como seres humanos, como marido y mujer, que viven juntos en armonía en su hogar.

En algunos momentos especiales traen ofrendas a esta pareja de montañas. Esto nos dice lo importante que es vivir en armonía con Dios, con los antepasados, con los vecinos y con todos los seres humanos, con la naturaleza y todas las criaturas.

Estas dos montañas son el símbolo de la vida humana, del hombre y la mujer, del marido y la esposa, de la familia y el hogar. Vivir juntos en armonía, en fraternidad, como una sola familia en paz con todos, es una necesidad. Por eso necesitamos construir buenas relaciones con Dios, con los antepasados, con todos los seres humanos, con la naturaleza y con todas las criaturas. La desobediencia o las acciones contrarias a la armonía, según las creencias más antiguas de estos pueblos, traerán desastres, problemas, sufrimiento... Y cuando esto sucede, es necesario hacer una ceremonia de reconciliación según sus "adat" (costumbres y tradiciones).

La erupción del 3 de noviembre

El 3 de noviembre a las 23.45 horas este par de montañas - especialmente el “marido” - tuvieron una erupción, y una gran explosión de chorros hirvientes y piedras incandescentes desde la montaña causó grandes desastres y sufrimiento. Murieron personas queridas, familias, hermanos y hermanas.

Según los datos proporcionados por Cáritas Larantuka, murieron diez personas, entre ellas una religiosa, Nikolin Pajo, superiora de la casa de las Misioneras Siervas del Espíritu Santo en Hokeng. Murió encerrada en su habitación y quemada por una gran piedra incandescente proveniente de la montaña. Nadie pudo ayudarla a salir de su habitación: fue muy triste. Muchas casas, edificios de colegios, el convento de las hermanas de Hokeng, el edificio del Seminario Menor de Santo Domingo, la casa de retiros, el dormitorio de estudiantes y muchas otras estructuras se quemaron y destruyeron con esta erupción.

Estamos verdaderamente entristecidos. Estamos profundamente doloridos

¿Qué podemos hacer en estas condiciones y en esta situación? Hay muchas personas que sufren como consecuencia de la erupción. Necesitan ayuda, muchas familias han perdido a sus seres queridos, sus casas se  quemaron y quedaron destruidas. Abandonaron su hogar y tuvieron que ir a otro lugar para salvar la vida. El edificio del Seminario Menor de Hokeng se incendió y hay que reconstruirlo. En las aldeas alrededor de la montaña hay que reaconstruir más de 2.600 casas. En estas condiciones y en esta situación las necesidades son muchas.

Queremos pedir y tocar su corazón para que nos ayuden. Expresemos nuestra solidaridad con nuestros hermanos y hermanas que sufren en el lugar del desastre causado por la erupción de la montaña volcánica Lewotobi en Larantuka, Flores Oriental, Indonesia. Estamos llamados a ayudarlos.

* obispo de Larantuka

(Con la colaboración de Nirmala Carvalho y Mathias Hariyadi)

 

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