El obispo de Kontum contra las autoridades vietnamitas: basta de ataques a la diócesis de Vinh
Hanoi (AsiaNews)- El obispo de Kontum, en los altiplanos centrales de Vietnam, pide a las autoridades vietnamitas el fin de los ataques difamatorios contra el obispo de Vinh y el inicio de un proceso de reconciliación con su pueblo. En una carta enviada a Thai Van Hang, vice- jefe de la provincia de Nghe-An, Mons. Michael Hoang Ducv Oanh invita a la administración local a no "echar más bencina sobre el fuego" y "a no provocar ulteriores sufrimientos" a una población ya marcada por tantos daños sufridos "ya de parte del hombre como de los elementos naturales". La referencia es al paso del tifón Wutif, la semana pasada, que provocó inundaciones en las calles, caídas de árboles y líneas eléctricas, más la destrucción de muchas casas e iglesias.
Desde hace tiempo la diócesis de Vinh, guiada por Mons. Paul Nguyen Thai Hop, está en el centro de una campaña difamatoria promovida por los vértices gubernamentales. La situación precipitó el 14 de septiembre pasado, cuando centenares de fieles de la parroquia de My Yen salieron a la plaza pidiendo la liberación de dos católicos, encarcelados desde hace meses sin haber cometido reato alguno. En respuesta, la policía atacó a los manifestantes provocando decenas de heridos y arrestando a numerosas personas. En los días siguientes, el obispo intervino condenando con firmeza la violenta represión.
Fuentes locales refirieron que detrás de los ataques contra los católicos estaría la mano de Thai Van Hang, el cual luego organizó una campaña difamatoria en los medios locales y nacionales contra Mons. Paul y contra la entera diócesis. El vice- jefe de la provincia envió a todos los obispos vietnamitas un durísimo comunicado, en el cual pedía que se aislase al obispo de Vinh e imponer de hecho su transferencia hacia otra zona. A desencadenar la ira del funcionario sería la entrevista que el prelado hizo a AsiaNews el 18 de septiembre pasado, en la cual describía la situación de los cristianos como "peligrosa y preocupante", apelándose luego a la comunidad internacional para poner fin a las repetidas violaciones de los derechos humanos y la liberación de los dos católicos de My Yen encarcelados.
En la carta a la defensa de su hermano, el obispo de Kontum rechaza las acusaciones y las listas de los ataques que "Yo mismo he sufrido durante años" y que "asemejan los hechos del My Yen": Hieu Dao Church (1975), Ninh Duc Church (1982), la tierra del Le Chi Church (1996), persecución anticatólica a K'bang e Kon Chro (2010), Turia Yop (2012), o las últimas heridas en Dak Pan, vertiendo sangre todavía. en todos estos casos, dijo Mons. Michael Hoang Duc Oanh, dijeron las autoridades de actuar "por el bien común" contra las personas que "cometieron toda clase de pecado" que causan perturbación del orden público, atacando a los funcionarios y buscando derrocar al gobierno legítimo. "Ahora basta de decirle mentiras a la gente," concluye el prelado, quien espera el fin de los ataques físicos y verbales contra los católicos, el respeto a la libertad religiosa y los derechos civiles y políticos.
08/10/2013
25/08/2017 13:18