El neo cardenal la Iglesia tahi sea siempre más misionera
Bangkok (AsiaNews/EdA)- "Para evangelizar, todos tenemos que comenzar siendo testigos. En 350 años el número de los cristianos no ha aumentado mucho. Quizás no fuimos muy cativos suficientemente en el rol de testigos, para decir qque Dios no es sólo para nosotros, sino para todos nuestros hermanos. Sin duda, debemos trabajar mucho más en el campo del Evangelio. Es una invitación a testimoniar, a la evangelización, al compromiso en la obra de anuncio en Tailandia, el indicado por el arzobispo de Bangkok en una larga entrevista concedida a Eglises d´Asie (EdA), en la vigilia de su partida para Roma. Mons. Francois-Xavier Krienthavani es uno de los 20 purpurados creados por el Papa Francisco en enero pasado, de los cuales 3 provenientes de Asia (con mons. Charles Bo, arzobispo de Yangon y mons. Pierre Nguyen Van Nhon, arzobispo de hanói9 El próximo 14 de febrero estará ene l vaticano, para recibir la birreta cardenalicia.
Nacido en 1949 en una familia católica de Bangkok, él estudió teología y filosofía en Roma para profundizar sus estudios en la Gregoriana; en el año 2007 el nombramiento como arzobispo de Nakhon Sawan, luego lo transfirieron a la capital thai en el 2009.
Relanzando la tarea misionera de la Iglesia thai a través del "dialogo entre católicos, entre cristianos de diversas confesiones y con los fieles de otras religiones", el uevo cardenal confirma que "para aquellos que quieren convertirse", nosotros somos abiertos" a recibirlos. "Nosotros anunciamos la Buena Noticia-agrega- y el Espiritu Santo trabaja en sus corazones de modo que puedan responder".
En tema del diálogo interreligioso, el arzobispo advierte que "es importante estudiar en modo profundo las Sagradas Escrituras", porque si se examinan "los textos sagrados de todas las religiones, se pueden encontrar frases similares", como la frase "no hagas a los otros lo que no quisieras te hagan a ti". El principio "de la unidad en la diversidad", agrega, es "un fundamento de la Iglesia cristiana" y es una invitación a "caminar y colaborar unidos para el bienestar de la sociedad y del progreso de las religiones". Porque el diálogo interreligioso, advierte, no sólo una "colaboración", sino también una "especie de intercambio de experiencias diversas".
El neo-cardenal recuerda el compromiso de la Iglesia en el sector de la Instrucción, un factor "muy importante para el bienestar de la sociedad", aunque "si queda aún mucho para hacer". "La Iglesia católica- explica el cardenal- es un apequeña realidad al interior de la sociedad thai, pero nosotros queremos colaborar a fondo con las otras instituciones, porque este sector pueda adquirir siempre más importancia". Debemos reiniciar de cero, advierte-es importante para todos los estudiantes de nuestras escuelas", prescindiendo de la propia fe, mientras que la enseñanza de la fe y el catecismo "son reservados a los estudiantes cristianos".
En un período caracterizado por una profunda crisis política y de inestabilidad que han llevado al golpe de Estado de la junta militar en mayo pasado, el arzobispo de Bangkok recuerda el deber de luchar 2contra la corrupción", que es un mal "inaceptable" para "una sociedad civil". Par el purpurado llegó el momento de "resolver el problema y los que está sucediendo (en estos meses) en Tailandia, podría ser un cambio importante para mejorar la sociedad tailandesa". En este sentido adquiere un valor aún más grande "el conjunto de los textos que componen la doctrina social de la Iglesia", que forman "un patrimonio" no sólo para los católicos, sino "que s utilizado también en muchas universidades "no cristianas". En concreto emerge con siempre mayor fuerza el valor de la presencia cristiana ene l mundo de los negocios, de la salud y en general en todos los sectores de la vida social- comprendida la educación- en la cual es posible difundir el anuncio evangélico "para cambiar, aunque sea en pequeño, a la sociedad misma".
En Tailandia los católicos son una pequeña minoría (unas 300 mil unidades sobre un total de uno 70 millones de habitantes, par al 0,5%, en una nación donde la mayoría es budista (95%). Sin embrago, ellos ofrecen una preciosa colaboración en mucho sectores de la vida cotidiana, de la instrucción a la sociedad, de las actividades en la vida social a la obra realizada para favorecer el diálogo interreligiosos.
