El gobierno “exprime” y “reprime” la población en vista de los Juegos asiáticos
Se realizarán en Asjabad en setiembre. No obstante la crisis económica, fueron gastados millardos para la construcción del barrio olímpico y del aeropuerto internacional. Anunciado el corte de ayudas a la población. Las Ong acusan la sistemática violación de los derechos humanos. Los turistas deberán ser seguidos durante toda su permanencia por “guías turísticas”, obligados a dar un informe de todos sus movimientos.
Asjabad (AsiaNews/Agencias)- A pocos meses del inicio de los quintos Juegos asiáticos indoor y de Artes marciales que se realizarán entre el 17 y el 27 de setiembre, Turkmenistán se divide entre la imagen brillante presentada por el gobierno y la realidad socio-económica siempre más difícil.
Turkmenistán está viviendo un momento de profunda crisis económica, como lo demuestra la dificultad vivida por la población en conseguir productos alimenticios y por el constante aumento de los precios. Durante un encuentro de gobierno de la semana pasada, el presidente Gurbanguly Berdimuhamedov anunció la interrupción del sistema de seguridad social que desde 1993 proveía electricidad, gas y agua gratuitos, por él definida “ineficaz”. Un sitio de la oposición, además, sostiene que el 15-20% del salario de los trabajadores en el sector del petróleo y del gas será descontado para pagar los Juegos.
Mientras tanto, Ong como Human Rights Watch e Turkmen Initiative for Human Rights (Tihr) denuncian las violaciones de los derechos humanos en el país, presionan sobre el organizador de los Juegos, El Consejo olímpico de Asia (OCA), para pedir respeto de los “principios olímpicos definidos en la Carta olímpica”, comprendidas la libertad de prensa y el respeto de la dignidad humana. Para las Ong, el gobierno turkmeno controla estrechamente todos los aspectos de la vida pública y niega en modo sistemático la libertad de asociación, expresión y religión. Entre las violaciones: control de los activistas disidentes y a los parientes de los disidentes exilados; prohibición de ingreso a los defensores de los derechos humanos y periodistas extranjeros. Son decenas las personas todavía víctimas de desapariciones forzadas, con probabilidad alojadas en prisiones turkmenas.
En este difícil contexto, Asjabad gasta enormes sumas para los Juegos: el barrio olímpico costó unos cinco millardos de dólares, mientras que el nuevo aeropuerto (que parece estar hundiéndose en la arena) costó 2,3 millardos. En los juegos deberían participar unos 8 mil atletas. Una actualización publicada el pasado 2 de junio en el sitio del evento habla de diez mil bailarines y artistas necesarios para las ceremonias de apertura y de clausura.
Las autoridades turkmenas anuncian que habrá disponibles unos 600 mil billetes. Sin embrago Asjabad no parece intencionada en tener turistas “vagabundos” por el país. El sitio oficial del evento reporta: “Durante la permanencia en Turkmenistán, los turistas deberían ser acompañados por un guía turístico en todo momento”. Si bien la presencia constante de un guía turístico sea un requisito común en el país, es la primera vez que un sitio oficial turkmeno lo afirme en modo explícito.
Una fuente anónima de Asjabad refirió a Radio Free Europe/Radio Liberty (Rfe/RI) que los guías turísticos tienen la obligación de informar a los servicios de inteligencia, al menos tres veces por día, sobre las actividades de los turistas”. Y no son los únicos. Según la misma fuente, también algunos empleados del Ministerio de seguridad nacional siguen a los turistas adonde vayan en vehículos separados y caminando a su lado en los mercados.
“Asjabad está exprimiendo al pueblo turkmeno para pagar los juegos- escribió el experto de Asia central, Bruce Pannier en un artículo publicado por Rfe/RI en marzo- y se asegurará que los lugares sean ocupados por caras sonrientes”.
18/09/2017 19:19
22/09/2017 14:57