El fin del bazar en Biskek

de Vladimir Rozanskij

Kirguistán se ve sacudida por las protestas de los comerciantes del mercado, que se niegan a adoptar las cajas registradoras impuestas por el gobierno. El Primer Ministro Žaparov: "Nuestro principal objetivo es luchar contra la pobreza, queremos sacar a la gente de la miseria", superando todas las formas de "economía gris".

Biskek (AsiaNews) - Kirguizistán está sacudida desde hace tiempo, y en particular en los últimos días, por las protestas de los comerciantes de los mercados, que se niegan a adoptar las cajas registradoras (Kkm) impuestas por el gobierno. Los empresarios de varias ciudades, especialmente de Biskek y Tokmak, también han secundado la protesta, pidiendo que se deje en vigor el sistema actual, por el que basta con obtener una licencia para exponer sus mercancías en los mostradores. El gobierno ha concedido una nueva moratoria de seis meses sin controles ni multas, tras la cual la medida será definitiva y rigurosa para "cerrar la era de la economía de bazar", como comentó el primer ministro Akylbek Žaparov.

Según los comerciantes del gran mercado Dordoj Motors de Biskek, entrevistados por Radio Azattyk, "el sistema del Kkm no nos conviene, no podemos trabajar así, no porque queramos eludir el pago de impuestos, siempre los hemos pagado regularmente... pero si vendemos 100 som de cigarrillos y no los registramos en el Kkm, nos cae una multa de 13 mil som, que se duplica y triplica las siguientes veces, y esto no es aceptable".

Los manifestantes fueron recibidos por el alcalde de Biskek, Ajbek Džunušaliev, que prometió tener en cuenta las demandas si se ponía fin a las protestas: "ningún problema se resuelve gritando, podemos reunirnos tranquilamente sin congelarnos en la calle, elegir un comité de 10-15 personas y hablaremos de ello, como ya hemos hecho con los líderes del mercado". En Dordoj Motors se venden sobre todo productos agrícolas, alimentos y piezas de automóvil, y allí trabajan más de 2.000 personas.

En el mercado de Bulak, en Tokmak, también hay protestas públicas desde hace varios días, y el alcalde local, Maksat Nusuvaliev, explicó a la prensa que hay cuatro grandes mercados en la ciudad, y que la administración mantiene varias negociaciones con todos los representantes de estos centros. "Entre ellos hay realmente tanto a favor como en contra de la Kkm, el hecho es que la mayoría de la gente no entiende el sistema, y debemos tener la paciencia de explicarlo sin perder el tiempo en manifestaciones inútiles", comentó Nusuvaliev.

En los últimos días también se han organizado concentraciones y huelgas en la región de Oš, en otros mercados de la capital, Biskek, y en las ciudades de Talas y Karakol. El propio presidente Sadyr Žaparov creó un grupo de trabajo para evaluar el alcance de estas manifestaciones y las reivindicaciones de los manifestantes. La moratoria de seis meses fue anunciada por el presidente de la Agencia Tributaria, Islambek Kydyrgyčov, al término de la reunión de la comisión, declarando que "este periodo de suspensión se dedicará a trabajar para aclarar el funcionamiento del sistema y permitir que la gente se acostumbre a él, y si es necesario prorrogaremos la moratoria". Los empresarios recibirán gratuitamente 30.000 dispositivos Kkm.

El Primer Ministro Akylbek Žaparov también celebró varias reuniones, en las que señaló que "sigue siendo difícil en el país comprender el alcance de este cambio en el sistema fiscal, y necesitamos que la información al respecto sea más completa... la economía de bazar se basaba en la acumulación primaria de capital, y esto es ahora una reliquia del pasado".

El Estado pretende "trabajar para el pueblo", como nos aseguran todos los dirigentes políticos, y no "favorecer los intereses de los jefes y los poderosos", esos "círculos internos de personas" que han corrompido a toda la sociedad sin ser nunca castigados. Como asegura el presidente, "hoy gozamos de un amplio y seguro consenso entre la población", que aprueba los programas con los que los presupuestos del Estado apoyan la construcción de nuevas infraestructuras y la "mejora del nivel de vida" de todos los ciudadanos. "Nuestro principal objetivo es luchar contra la pobreza, queremos sacar a la gente de la miseria", superando todas las formas de "economía gris", promete solemnemente Žaparov, que comienza una nueva vida a partir de las cajas electrónicas de los puestos del mercado.

Foto: Flickr / Malcom Williams