El ex líder de Donetsk fue ascendido en Kalmukia
Dmitry Trapeznikov fue designado viceprimer ministro de la república de los calmucos. El ex líder de los ultra-fans del Shakhtar Donetsk, ocupó la cúpula de gobierno de la república separatista del Donbáss ucraniano. Protegido por el círculo de Putin, la oposición lo critica por su escasa preparación para desempeñarse en la administración pública.
Moscú (AsiaNews) - Despierta reacciones de asombro la carrera de Dmitry Trapeznikov. En poco años, de ser un funcionario ucraniano, el hombre pasó a liderar a los separatistas de Donetsk, la ciudad del Donbass y epicentro de los enfrentamientos entre Rusia y Ucrania. Primero fue designado como alcalde de Elistá, la capital de la república rusa de Kalmukia. Ahora el gobernador local, Batu Khasikov, lo ascendió a viceprimer ministro.
Nacido en 1981, Trapeznikov saltó a la fama a finales de los años 90 como animador de los hinchas más salvajes del equipo de fútbol "Shakhtar Donetsk", propiedad del oligarca pro-Putin Rinat Akhmetov, lo que le valió cierta fama local. Por su aspecto vivaz y su actitud agresiva, el hombre fue apodado "Sr. Pomidor", en alusión a un personaje de dibujos animados que suele ser utilizado en los anuncios publicitarios de pizzas.
Tras enriquecerse en circunstancias poco claras, con el inicio de los enfrentamientos de 2014 entre el gobierno ucraniano y los separatistas prorrusos, Trapeznikov comenzó a recorrer las calles luciendo un uniforme de guerra, a pesar de no ser militar. Se convirtió en la mano derecha del líder de los separatistas (Aleksandr Zajárchenko) y luego le sucedió durante una semana al frente de la autoproclamada república de Donetsk -en 2018 un coche bomba mató a Zajárchenko.
En 2019 Trapeznikov reapareció sorpresivamente en Elistá, probablemente a pedido del ideólogo de Putin, Vladislav Surkov, su protector político. Surkov es un deportista, amante del fútbol y del boxeo, pasiones que también comparte con el calmuco Khasikov.
Algunos ciudadanos calmucos protestan, alegando la ilegalidad de estos nombramientos: Trapeznikov no tiene un diploma ruso, no tiene experiencia en el gobierno, salvo en funciones de bajo nivel, y ni siquiera hizo el servicio militar. Fue utilizado por los rusos como un peón en la actual "guerra híbrida" en el Donbass. Y ahora Trapeznikov ha sido recompensado con un ascenso en un área completamente ajena a él. Resulta evidente que este último salto en su carrera es un modo de evitar que haga daño.
Kalmukia es un rincón de Asia en territorio europeo: es la única región de mayoría budista del Viejo Continente. Sus habitantes, los calmucos, descienden de los Oirates de Zungaria, una población mongola seminómada de las estepas asiáticas. Se trasladaron a estos parajes en torno al año 1600, mucho después del reinado de los tártaros, y desde entonces esta zona ha sido un rincón especialmente pacífico de la Rusia europea, encajonado entre las turbulentas tierras caucásicas y los variados pueblos del Alto Volga. Luego de la caída de la URSS, la república quedó en manos de un joven funcionario, Kirsan Iljumžinov, hoy sexagenario. Fidelísimo de Putin, fue presidente hasta 2010. Luego se retiró de la escena política pero siguió controlando la situación entre bastidores. Desde entonces se desempeña en la presidencia de la Federación Internacional de Ajedrez.
El presidente Jasikov respondió a la polémica elogiando a Trapeznikov: "él comenzó su labor en Kalmukia, donde se ocupó de gestionar la crisis y ha demostrado ser muy eficaz. Bajo su dirección, la ciudad de Elistá se ha transformado ". Los ciudadanos de la capital no parecen estar de acuerdo con estas valoraciones entusiastas: en Kavkaz.Realii, Natalia Manžikova, diputada del partido "Rusia Justa", afirma que "bajo su mandato, la ciudad estaba inundada de basura y las carreteras estaban mal reparadas".
La gente esperaba que el "manager de Donetsk" dejara la república, para ir a calentar alguna silla en otras regiones. Su nombramiento creará tensiones en el gobierno de Elistá. Según Manžikova, "esto demuestra la falta de independencia de nuestros dirigentes en la gestión de los organismos administrativos". El desplazamiento de la marioneta del Kremlin de Donetsk a Elistá muestra la fragilidad de los líderes calmucos. Pero también deja en evidencia la grotesca inconsistencia de las "repúblicas separatistas" de Ucrania, por las que hoy podría estallar una nueva guerra mundial.
23/02/2022 10:55
