El ciclón Gaja devasta Tamil Nadu: obispos de luto por el ‘enésimo desastre natural’

Las áreas más golpeadas son los distritos de Nagapattinam y Vedaranniyam. También resultó dañada la basílica de Nuestra Señora de la Salud en Vailankanni, el mayor santuario mariano de la India. El gobierno y la Iglesia local brindan socorro a miles de desplazados.

Chennai (AsiaNews) – Los obispos católicos de la India están de luto por “el enésimo desastre natural” que acaba de golpear la costa sur-oriental de país. Ayer, el Estado de Tamil Nadu (y en medida menor, el territorio de Pondicherry) fue devastado por el potente ciclón Gaja. La furia del viento y de las lluvias dejó a su paso un saldo tremendo: las últimas cifras informan 23 muertos (pero se estima que el número crecerá) y más de 80.000 evacuados. El desastre natural, escribe en una nota Mons. Theodore Mascarenhas, secretario general de la Conferencia episcopal india (CBCI), “se ha cobrado un duro saldo [de víctimas], a pesar de las precauciones adoptadas por el gobierno y la Iglesia”.

A pocos meses de las inundaciones que devastaron el Estado de Kerala, la India nuevamente se ve afligida por una catástrofe climática. Las zonas más golpeadas son los distritos de Nagapattinam y Vedaranniyam. El ciclón provocó aludes y desprendimientos de tierra, arrancó árboles de raíz e hizo volar por los aires los techos de las casas. También resultaron dañadas las comunicaciones y la red del suministro eléctrico. Los vientos causaron daños de gravedad en el santuario mariano más importante de toda India, la basílica de Nuestra Señora de la Salud, en Vailankanni. Mons. Mascarenhas informa que “la brutalidad de los vientos hizo que se desplomara la cruz que corona la torre de la iglesia y esto causó graves daños en la estatua de Jesús cercana a la Morning Star Church”.

El gobierno ha activado dos números de emergencia (1070 para las llamadas a la administración estatal y 1077 para aquellas distritales). Hay varias brigadas de socorro trabajando en el territorio para auxiliar a los evacuados, que han sido alojados en 470 centros asistenciales ubicados en los seis distritos. También rige un alerta máximo para los pescadores, y se aconseja evitar adentrarse en el mar.

El secretario de los obispos informa que la Iglesia católica ha puesto en alerta su maquinaria de socorro a través de varias organizaciones que se desempeñan en el territorio, bajo la guía de la diócesis (Tasoss, Tmsss y Pmsss). Caritas está evaluando la magnitud de los daños y pondrá en marcha dispositivos de ayuda “a la mayor brevedad”. Por último, concluye; “La Iglesia católica expresa su solidaridad a todas las personas que están sufriendo por esta calamidad y desea ayudar a todos, prescindiendo de cuál sea su religión, comunidad o proveniencia. Rogamos por el eterno descanso de las víctimas y hacemos llegar nuestras condolencias a las familias afligidas, asegurándoles nuestro sostén y consuelo”.