El asesinato de Al Huweidi pone fin al sueño de un Kurdistán sirio autónomo
Bashir Faisal Al Huweidi era un importante dignatario de la tribu árabe del Nordeste sirio, aliado de los kurdos. Pero estaba en contra de la supremacía kurda en la zona. La reivindicación de Daesh por el asesinato fue una “noticia falsa”: el sitio islamista había sido hackeado. Ahora, las tribus árabes consideran a los kurdos sirios como una “fuerza de ocupación”.
Al Raqqah (AsiaNews)- El sueño de un Kurdistán sirio autónomo esta desvaneciéndose entre las objeciones planteadas por la población árabe local y las amenazas turcas, por la otra. La semana pasada, en Raqqa se produjo una ruptura cuasi definitiva entre kurdos y árabes. Mientras el ejército turco atacaba posiciones en Tal Jihan (Hassake), en manos de las milicias Al Sanadidi, compuestas por árabes de la tribu Shemmar, unidos a las Fuerzas de la Siria Democrática (Kassad), el 2 de noviembre, en Ar Raqqah, fue hallado el cuerpo de uno de los dignatarios árabes más importantes, asesinado con un arma de fuego, con disparos a quemarropa. La víctima es el jeque Bashir Faisal Al Huweidi, uno de los dignatarios más prominentes de la tribu árabe siria de Al Afadila, acérrimo sostenedor de la revuelta contra el gobierno y favorable a la autonomía administrativa y política del Nordeste sirio, teniendo en vista un sistema federal a futuro. Al principio, todas las sospechas iban dirigidas a Damasco o Ankara. El gobierno turco ya había declarado su pretensión de continuar la lucha contra los “terroristas” (léase, kurdos) separatistas y sus sostenedores incluso más allá de la margen oriental de río Éufrates.
Sin embargo, nadie acusó el gobierno sirio, y tampoco al turco sino que, por el contrario Kassah enseguida levantó el dedo acusador contra Daesh (EI). No pasó una hora desde su declaración, que en el sitio oficial de Daesh apareció una reivindicación del Estado islámico por haber “liquidado al infiel aliado de los kurdos”.
Sin embargo, un error banal exonera a Daesh del crimen, al revelar que el comunicado había sido falsificado. En efecto, la reivindicación informa la fecha aludiendo al año 2018 DC, pero en los documentos oficiales y en las reivindicaciones de Daesh, siempre se ha utilizado la fecha del año islámico, partiendo de la Hégira.
Aunque el error fue corregido de inmediato, dio lugar a dudas: ¿cómo fue posible publicar un comunicado falso en un sitio oficial de Daesh? ¿Acaso existen organismos externos a Daesh que poseen los códigos de acceso a los sitios del Califato islámico?
Un exponente de la tribu Al Afadila –que pide mantenerse tras el anonimato –niega que Daesh esté detrás del asesinato. En diálogo con AsiaNews, recalca: “el jeque Al Huweida, que Alá tenga misericordia de él, jamás huyó de Ar Raqqah, ni siquiera en los momentos más difíciles, cuando Ar Raqqah estaba siendo ocupada por Daesh. Si Daesh quería asesinarlo, ¿por qué no lo hizo en ese entonces?”
En efecto, el jeque asesinado tenía pésimas relaciones con los kurdos y era considerado el enemigo número uno de la alianza entre tribus árabes y kurdos sirios. Para los kurdos, esta alianza reviste gran importancia en el Nordeste, ya que, no siendo una mayoría, buscan el apoyo de los árabes, que sí son mayoritarios, para crear el Kurdistán sirio o de Rojava. Sin embargo, el jeque estaba en contra de la creciente supremacía kurda en aquellas tierras, que llevan siglos siendo árabes y donde los kurdos arribaron buscando huir de las persecuciones turcas desplegadas después de la Primera guerra mundial.
El jeque asesinado había mostrado su oposición a la expansión de la influencia kurda en esta región árabe, donde desde hace un año a esta parte, las leyes de la administración local tienden a proponer el kurdo como lengua dominante, llegando incluso a clausurar aquellas escuelas que se niegan a adoptar el sistema educativo impuesto por ellos, y se mantienen fieles a los libros escolares elegidos por el Ministerio de Educación de Damasco.
Llegado este punto, las tribus árabes han acusado a los kurdos de Kassad de estar detrás del homicidio y han anunciado la ruptura de cualquier tipo de alianza militar, política, económica y social con los kurdos del Norte de Siria, en un momento particular, en el que Daesh ha logrado asentarse nuevamente en amplias zonas sobre la frontera con Irak.
Las tribus árabes, que abarcan, entre otras, las de Al Walda, Al Sabkha, Al Ajil, Al Omeyrat, Al Huleisat y Abu Assaf han anunciado, a través de un comunicado emitido desde Ar Raqqah, que pretenden iniciar una revuelta contra Kassad y, asimismo, luchan contra la presencia, en la región, de las Fuerzas de la Siria Democrática, considerada una “Fuerza de ocupación”.
Los árabes de Ar Raqqah se han negado a acoger delegaciones kurdas que se acercaron a presentar condolencias y a participar en el funeral y en el luto de tres días por el jeque muerto. Hace 2 días, 200 dignatarios de Ar Raqqah hicieron un llamamiento a las tropas americanas presentes en la región, para solicitarles que “emprendan una investigación independiente y transparente sobre el asesinato, y que procedan a interrumpir cualquier forma de sostén a las milicias kurdas de Kassad. Ellos acusan a los kurdos de haber causado: cambios demográficos, evacuación y alejamiento forzado de los habitantes, torturas, destrucción de bienes, incendio de casas, arrestos arbitrarios, robos a mano armada, desorden, terror, enrolamiento de adolescentes en las milicias, despacho de sustancias estupefacientes, llegando además a imponer precios a los productores y recurrir a la segregación y a la discriminación en la provisión de agua, electricidad y asignación de cargo municipales”.
El equilibrio está roto y quizás se desvanezca para siempre el sueño de un Kurdistán sirio, una zona rica en recursos hídricos, petrolíferos y agrarios de la que depende toda Siria. La prisa de los kurdos sirios por imitar a sus con-nacionales de Irak, con leyes a favor del separatismo y basándose exclusivamente en las fuerza armadas, han hecho fracasar la ilusión de la llamada Rojava. Y todo esto ocurre mientras se asiste a un mayor avance del ejército regular sirio, proveniente del sur, y del ejército turco, desde el oeste.
23/02/2019 12:36
04/05/2016 14:53
11/05/2021 10:48
04/01/2024 14:56