El Vaticano propone agencia de la ONU contra la trata de personas, y que se trate como un crimen contra la humanidad

Las conclusiones de la plenaria de la Academia Pontificia de las Ciencias Sociales. Zamagni: "la trata de seres humanos debe ser no sólo moralmente sino también jurídicamente considerada como un crimen contra la humanidad, como sostiene fuertemente el Papa".

Ciudad del Vaticano (AsiaNews) – Hacer de la trata de personas un delito contra la humanidad y crear una agencia de la ONU especializada en combatirla. Son las propuestas concretas que surgieron de la sesión plenaria de la Academia Pontificia de las Ciencias Sociales, que terminaron hoy y que se reunieron en el Vaticano durante cinco días para discutir el tema.

La reunión sobre el tema de la trata de personas había sido solicitada por el Papa Francisco, que podría conducir a la propuesta de creación de un organismo especializado de las Naciones Unidas, el 15 de septiembre, con motivo de su intervención planificada antes de la Asamblea General de la ONU.

Al ilustrar hoy las conclusiones de la Academia Pontificia, Stefano Zamagni ha argumentado que debe ser "una autoridad en el modelo del comercio mundial, que sea capaz de hacer cumplir los protocolos" en el campo de la trata de personas, en sus diversas formas que van desde la prostitución, al trabajo forzado y la venta de órganos.

"Hemos recogido y puesto en confrontación - explicó Zamagni -. Académicos, investigadores, sector del voluntariado, responsables políticos. La primera cuestión, el tema dominante es que el tráfico de seres humanos debe ser no sólo moralmente sino también jurídicamente considerado como un crimen contra la humanidad, como lo sostiene firmemente el Papa. Esta decisión no sólo es importante, sino revolucionaria, ya que anularía la perspectiva actual que ve este delito sólo como algo contra el ordenamiento de los Estados individuales".

Si esto sucede, "usted podría dar vida a una agencia dentro de la ONU para luchar contra la trata de seres humanos. Por lo demás, no se enfrenta esta tragedia de una manera seria. Y luego, es necesario equilibrar las acciones de contraste, equilibrándolas y orientándolas no sólo en el lado de la "oferta", es decir, el tráfico de contrabandistas y organizaciones terroristas o grupos criminales, sino también en el lado de la "demanda", lo que significa de las empresas o agencias que organizan el trabajo ilegal o explotación sexual de estas personas "objeto" de la trata. Estos son los puntos clave en los que el Papa y la Santa Sede quieren involucrarse en la escena internacional".