El Sultanato de Brunei introduce normas inspiradas en la Sharía
Bandar Seri Begawan (AsiaNews)- Condenas a muerte por lapidación a los adúlteros, amputación de las articulaciones, fustigación para otros reatos como el aborto y la consumición de alcohol. Son algunos de los ejemplos de una progresiva islamización del Sultanato de Brunei, en Asia Sud-este, donde se está llevando a cabo una "gradual introducción " de normas "inspiradas en la Sharía", que se concluirá "en los próximos meses". El anuncio oficial llegó esta mañana de parte del Sultán Hossanal Bolkiah, uno de los hombres más ricos del mundo, y esto demarca un testimonio siempre más decidido en el reino.
El Sultán de Brunei (de 67 años) declaró que "con la entrada en vigor de la ley", "nuestro deber hacia Allah será cumplido". Desde hace siglos la familia de Hassan Bolkiah detiene el poder en el pequeño reino de 400 mil personas y riquísimo en petróleo; está en el gobierno desde 1967, cuando tenía 21 años. Desde 1996 el presiona para introducir la ley islámica- y de la relativas puniciones- en el estado.
Por otro lado en el País está ya en acto una práctica conservativa e integralista del islam, si confrontado con otras naciones de la zona como Indonesia y Malasia. La venta y la consumición del alcohol están prohibidas y las autoridades controlan las actividades de las otras religiones.
El nuevo código penal está inspirado en la ley islámica y debería valer sólo para los musulmanes, pero no es todavía claro se eso será aplicado con extremo rigor o con más tolerancia. Por otro lado en el País existe ya en vigor un sistema binario, en el cual los tribunales civiles se inspiran en el derecho británico y los tribunales de la Sharía están limitados a cuestiones personales y familiares, como las causas matrimoniales.
El 70% de los habitantes de Brunei es de religión musulmana y de etnia Malay, el 15% no musulmán es de origen chino, seguidos por las poblaciones indígenas y otros grupos menores. Una parte consistente de la población teme una rígida e inflexible aplicación de la Sharía, si bien los vértices del poder judicial dicen y aseguran que será una aplicación "discreta" en el uso de las normas. Aseguraciones que no parecen ser suficientes para contener la "islamización" deseada por el sultanato del País.