El Senado de los EEUU aprueba la extensión de las sanciones contra Teherán

La Iran Sanctions Act prevé el prolongamiento de la sanciones por 10 años. El texto fue aprobado con 99 votos a favor y cero en contra. Con anterioridad, la Cámara había dado luz verde a la ley. Ahora se aguarda la firma del presidente saliente Obama. Los halcones de la futura administración Trump, entre ellos el jefe de la CIA, dispuestos a cancelar el acuerdo internacional. Satisfacción en Israel.

Washington (AsiaNews/Agencias) – El Senado estadounidense ha aprobado la extensión de las sanciones contra Irán por 10 años más. Según la administración de los EEUU, la votación no se contrapone al acuerdo internacional referido al programa nuclear de los ayatolás -que fuera suscripto el año pasado-, sino que permite restablecer las sanciones, con efecto inmediato, en caso de darse violaciones en relación al contenido del texto. La medida fue aprobada con el voto de republicanos y demócratas, y ahora terminará sobre el escritorio del presidente (saliente, puesto que el mandato vence el enero) Barack Obama para su firma.

La Iran Sanctions Act fue aprobada ayer con 99 votos a favor y 0 votos en contra. La misma prevé medidas punitivas contra el sector bancario iraní, además de otras a aplicar sobre el sector energético y sobre las industrias vinculadas a la defensa.

En noviembre pasado tuvo lugar una votación análoga en la Cámara, en la cual, también en esa oportunidad, la medida fue aprobada por amplia mayoría con el voto bipartidista.

La ley no tiene ningún nexo directo con el pacto nuclear, más conocido con el acrónimo Jcpoa. Sin embargo, advierten los expertos, algunas restricciones presentes en el texto en realidad son contrarias al espíritu del acuerdo internacional. Los senadores demócratas Dianne Feinstein y Tim Kain explican que “la ley [vinculada a las sanciones] debe seguir vigente” para permitir una “inversión de ruta inmediata” en caso de que haya violaciones.

Luego de años de embargo, en el 2015 Irán obtuvo un parcial aligeramiento de las sanciones económicas de Occidente, a cambio de un acuerdo sobre el controvertido programa atómico. Un entendimiento que fue recibido de manera positiva por la mayoría de la comunidad internacional; entre los que han asumido posiciones críticas figuran Israel y el Congreso americano (con mayoría republicana), donde se aguardan las primeras medidas del recientemente electo presidente Donald Trump.

El mes pasado, el ayatolá Ali Khamenei amenazó con “reacciones” de la República islámica, en caso de que el Parlamento de los EEUU aprobara la norma que prolonga las sanciones. Para el líder supremo iraní, esta ley es una “violación” del acuerdo nuclear, el cual “no debe transformarse en un instrumento para ejercer presión sobre el pueblo iraní”.

Ahora se aguardan las medidas del recientemente electo presidente Trump, que hará su ingreso a la Casa Blanca el próximo 20 de enero; con esta norma votada por el Congreso él tiene el campo libre para relazar las sanciones contra Teherán.

Por otro lado, durante la campaña electoral, el multimillonario estadounidense criticó en varias oportunidades, y usando palabras ácidas, el acuerdo internacional, y no se excluye que repiense el tema, acogiendo las indicaciones de algunos de sus más estrechos colaboradores, entre los cuales figura el nuevo jefe de la CIA, Mike Pompeo. Al día siguiente de la oficialización del nombramiento de Pompeo, él mismo declaró en Twittter que estaba dispuesto a “retirar” un acuerdo que definió como “desastroso”; palabras que, en los días que siguieron, tuvieron un amplio eco en los medios israelíes.