El Estado islámico contra la Navidad, fiesta “herética”. En Kirkuk fueron profanados dos cementerios cristianos
Bagdad (AsiaNews)- Nuevos ataques contra los cristianos y las fiestas de Navidad en el norte de Irak llevados a cabo por Daesh (acrónimo árabe del Estado islámico, EI) y otros grupos extremistas. Fuentes de Asianews en el norte del país refieren que los milicianos del ISIS en Mosul han colocado carteles en la ciudad, en los cuales ordenan a los musulmanes “que no festejen” de ninguna manera la Navidad con los cristianos, porque son “heréticos”. En Kirkuk, en cambio, grupos de extremistas islámicos irrumpieron en dos cementerios cristianos, profanando y destruyendo diversas tumbas.
Los cristianos iraquíes responden a quienes se expiden sobre los ataques de estas últimas horas, y afirman que quieren celebrar la fiesta, sin ocuparse de las amenazas y de las intimidaciones.
El Patriarcado caldeo condena los nuevos episodios de violencia e intimidación contra la comunidad cristiana iraquí, y lo hace utilizando las mismas palabras contenidas en el Corán, en el cual se afirma que los cristianos no son heréticos y que la Trinidad es una expresión teológica de la revelación del único Dios.
El libro sagrado de los musulmanes, explican los vértices de la Iglesia caldea, describe a Cristo como “vocero de la Palabra de Dios”. Los cristianos no son politeístas ni infieles, y por eso el Corán afirma que “son los más cercanos a aquellos que creen”.
Algunos fieles de la capital entrevistados por AsiaNews, invitan a los musulmanes a “ocuparse de su fe” y “de dejarnos vivir y celebrar libremente la nuestra” como dice el Corán mismo, que prohíbe “construcciones” en tema de fe y afirma “Yo tengo mi religión y vosotros la vuestra”.
Mientras tanto, el diputado cristiano Yonadam Kanna, presidente del grupo Rafeedain mostró a la Asamblea un documento en el cual se lee que más de 700.000 cristianos han abandonado el país a causa del conflicto y de la violencias en los últimos treinta años. Las migraciones se iniciaron en los últimos años del régimen de Saddam Hussein y aumentaron en los últimos años.
La aparición del Estado islámico y el éxodo de centenares de miles de personas de Mosul y de la llanura de Nínive en el verano de 2014, son el último de una serie de ataques, con profanaciones a iglesias y a lugares de culto, de violencia ejercida tanto sobre individuos como sobre grupos, de erradicación y expropiación de bienes y propiedades. De más de un millón y medio de personas que habitaban allí en el 2003, se pasó hoy a menos de quinientas mil.
23/12/2015