El Estado islámico conquista parte de Kobane, miles de civiles en fuga hacia la frontera turca
Damasco (AsiaNews/Agencias)- Los milicianos el Estado islámico (EI) han conquistado tres barrios de la ciudad de Kobane, en la frontera entre Siria y Turquía, después de una larga batalla combatida calle por calle con los peshmerga kurdos. Se trata de un centro de importancia estratégica enorme, de hace dos años gobernado por partidos kurdos, que habían asumido el control de la zona después del retiro del ejército de Damasco. En los primeros meses del año los milicianos se apropiaron de las zonas circunstantes, dando vida a un asedio de la ciudad en tres frentes diversos; la ofensiva final inició el 16 de septiembre pasado y causó la fuga en masa de más de 100 mil prófugos más allá de la frontera turca.
Los combatientes islamistas penetraron por los distritos orientales, izando su bandera negra en los edificios y colinas circunstantes. Fuentes locales refieren que al menos 2 mil civiles han abandonado la ciudad, dirigiéndose hacia la frontera turca, elevando a 180 mil el número total de evacuados.
Según los expertos el control de Kobane permite al Estado islámico controlar una feta consistente de frontera que separa Turquía de Siria, al menos unos 100 km de territorio hasta su bastión, Raqqa. De parte de los combatientes kurdos se elevó un pedido de ayuda y sostén directo también a Ankara, si bien hasta ahora el gobierno turco haya mostrado poco interés en frenar la avanzada del EI.
Esta mañana en al-Hassaka (norte de Siria, a unos 220 km al este de Kobane) al menos 30 combatientes kurdos de la Unidad de protección del pueblo (Ypg) murieron en un doble atentado suicida. Desde el frente turco llega la noticia de un intercambio de prisioneros con el EI: más de 180 combatientes de la jihad- entre los cuales franceses, británicos, macedonios, suecos y un suizo- fueron liberados contra la liberación de 46 diplomáticos de Ankara, secuestrados en los meses pasados. Es cuánto refieren fuentes del Times, avaladas por el gobierno de Londres que juzga "creíble" la noticia.
El último suceso militar obtenido por el EI en Kobane revela la ineficacia de la estrategia puesta en campo por la coalición, querida y guiada por la Casa Blanca, para frenar a los milicianos. La confirmación llega de parte de un responsable kurdo, Idris Nahsen, según el cual los bombardeos árabes-estadounidenses "son insuficientes para batir en el campo a los terroristas", que pueden contar con la inercia, si no con la connivencia, de gobierno ciertamente no hostiles como el turco.
La dramaticidad de la situación en el terreno es confirmada por testimonios que llegan de médicos y del personal sanitario del hospital de Suruc, poco distante del campo de batalla de Kobane. Poco más de 2 semanas de batalla han causado centenares de muertos en ambos frentes, comprendidos entre ellos a mujeres y civiles; las condiciones de los heridos son a menudo graves para las reservas limitadas de la estructura, que no siempre logra intervenís en modo eficaz. Los corredores de la estructura nos dan una imagen terrible: ancianos abandonados en las sillas de rueda, niños pequeños aferrados a sus madres ya marcadas profundamente por los dramas de la guerra.