El 2019 marcó un récord de ambientalistas asesinados. El caso de las Filipinas
Según el Global Witness son al menos 212 los activistas pro-ecología asesinados el año pasado. pero el dato puede ser subestimado. Más de la mitad de la víctimas en Colombia y Filipinas. Para el gobierno del presidente Duterte, la eliminación de los opositores y activistas es considerada como “asuntos normales”
Manila (AsiaNews/Agencias) - Son 212 los ambientalistas asesinados en todo el mundo en el año 2019, con el mayor número de muertos en el frente de la batalla por la defensa de la naturaleza. Pero según dicen los expertos el número es subestimado. Es cuanto denunció ayer el grupo ambientalista Global Witness, según el cual Colombia y Filipinas unidas cuentan más de la mitad de las víctimas globales (respectivamente 64 y 43), seguidas por Brasil, México, Honduras y Guatemala.
Cerca del 40% de las víctimas pertenecen a poblaciones indígenas y los dos tercios del total murieron en América Latina. Y una sobre 10 es una mujer.
Por decenios las comunidades nativas de las selva de América central y de Sudamérica, de Asia y de África vieron las tierras de sus antepasados degradarse y destruirse en manera progresiva, a menudo con la aprobación de las autoridades locales o de los gobiernos nacionales.
Los 34 homicidios vinculados a los negocios del sector agrícola se verificaron en su mayor parte en Asia, en modo particular en Filipinas. Dos activistas indonesios fueron acuchillados a muerte el pasado octubre, en los predios de una plantación de aceite en la parte septentrional de Sumatra.
En Filipinas, operaciones de policía y de los repartos especiales han llevado a la masacre de 14 agricultores de caña de azúcar en la isla de Negros en marzo, en los meses precedentes otras 9 fueron asesinados en circunstancias análogas.
Los incendios de los bosques, fenómeno que preocupa a muchas áreas del continente asiático no privan sólo al planeta de la vegetación capaz de absorber el gas serra, pero determinan también un aumento de anhídrido carbónico en la atmósfera. Las operaciones de deforestación están relacionadas, en modo más o menos directo, a 24 muertos; además de otras 14 a la sustitución ilegal de cultivos, 11 a la reforma agraria y otras 6 a la gestión de los recursos hídricos o a la construcción de diques.
En Filipinas un jefe tribal Manobo fue asesinado durante un bombardeo realizado por los militares mientras protestaba contra las operaciones de extracción ilegal cerca de Kitaotao, en el norte de Mindanao. “Las florestas que quizás permanezcan vírgenes-observa el informe de Global Witness- como aquellas de manobo, son abatidas con la finalidad de extraer los minerales y aumentar las ganancias”.
“Estas cuestiones son consideradas al final, como ‘normales asuntos’ por el presidente Rodrigo Duterte y por su gobierno” concluye el informe. Las autoridades de Manila “están promoviendo políticas que privilegian los combustibles fósiles y aprobaron leyes draconianas, que pueden ser utilizadas para hacer callar a aquellos que tratan de contrastarlas”.
25/03/2023 15:31