EL Fin de Año paraliza Guangzhou: cien mil personas hacen fila para esperar el tren

La estación de la metrópolis meridional fue tomada por asalto por una multitud inmensa: los trenes, a causa del mal tiempo, están atrasados o son cancelados. Miles de pasajeros llegan con dos días de anticipación por temor a perder el vagón. Para el Año nuevo lunar la Autoridad del Transporte prevé unos trescientos treinta y dos millones de pasajero por un total de 2,92 millardos de desplazamientos individuales.

Guangzhou (AsiaNews/Agencias)- Una inmensa multitud compuesta por más de cien mil personas está bloqueada desde hace dos días en la estación ferroviaria de Guangzhou, capital de la rica provincia de Guangdong, en espera de poder volver a casa para el Fin de año chino. Las lluvias heladas han azotado la zona haciendo imposible la partida de los trenes y centenares de kilómetros de vías resultan inoperables. El gobierno puso en funcionamiento las medidas de emergencia “nivel tres”, el más alto: desde 2008 que estás no eran activadas.

El mal tiempo bloqueó también Shanghai, donde unas treinta mil personas están esperando los cincuenta trenes atrasados o imposibilitados de moverse. La cola parece inmóvil y miles de pasajeros se presentaron en la estación dos días antes de la partida prevista, por temor a no lograr subir al vagón que les corresponde. Más de dos mil seiscientos agentes de seguridad están empleados contra eventuales robos o luchas.

El enorme flujo de pasajeros se explica por la llegada del nuevo Año lunar, que este año está bajo el signo del Mono. Por tradición, la vigilia del Fin de año se la pasa junto a la propia familia en sus pueblos o países de origen: esto implica el retorno a casa de centenares de millones de migrantes que, de manera ilegal, trabajan en las grandes ciudades o en las provincias más ricas.

En la tradición oriental, la Fiesta de la Primavera es la ocasión principal para iniciar nuevos negocios, sean éstos pequeños o grandes, y para cerrar las cuentas del año pagando todas las deudas. En los días siguientes al Fin de Año se van a visitar los templos taoístas y budistas para tratar de buscar fortuna. En las puertas de las casas y al ambos lados de las puertas de los negocios se cuelgan escritos augurales que sugieren: “Éxito en todas las empresas”, “Grandes riquezas”; “Cada año es siempre mejor”.

Los refranes colgados en las habitaciones hablan de riqueza, larga vida, muchos hijos, carrera exitosas: “Puedan todos tus deseos ser escuchados” o “Diez mil generaciones”. Los cristianos exponen normalmente frases sacadas del Evangelio y llenas de deseos de bendiciones deDios.

Este año, la Autoridad nacional del Transporte prevé un flujo de unas trescientas treinta y dos mil personas: se trata de un aumento del 13% respecto al mismo período del año anterior. En los cuarenta días de festividad- que van del 24 de enero al 3 de marzo- se esperan dos millones noventa y un mil desplazamientos individuales a través de cualquier medio: aviones, trenes, automóviles, pulman y ferry son los más usados. Como promedio, cada pasajero debería desplazarse unos cuatrocientos diez quilómetros.