EEUU, preocupado por la ‘invasión china’ en los puertos de Israel
En la mira, el puerto comercial de Haifa, que a partir del 2021 será controlado por China. En el 2018, Beijing prometió 23 millardos en créditos y ayudas a la región, y está dispuesta a destinar otros 28 a inversiones e infraestructuras. El Pentágono alerta: crece el número de naciones de la región que giran alrededor de Beijing.
Tel Aviv (AsiaNews/Agencias) - En el marco de una creciente “guerra comercial” entre China y los Estados Unidos, el Pentágono alerta: Israel y otras naciones del Oriente Medio están quedando cada vez más sumidas en la órbita de Beijing. Es por ello que en el último período, la Casa Blanca ha decidido enviar más de un mensaje de advertencia -en particular, al gobierno de Tel Aviv- para que se cancelen una serie de acuerdos potenciales, empezando por aquél centrado en el puerto comercial que funciona en Haifa.
El responsable para Oriente Medio del Departamento de Defensa resalta que el ejército de los EEUU presta “gran atención” al comercio entre China e Israel, así como a las inversiones de Beijing en infraestructuras. Además, el Pentágono da la alarma por el acuerdo de dos millardos de dólares que permitirá a Shanghai International Port Group (afín al gobierno) controlar, a partir del 2021, las operaciones del puerto de Haifa, que también es utilizado como escala por la Sexta Flota de los EEUU.
Cabe subrayar que el gigante chino fue el único oferente en la licitación del 2015, a través de la cual se asignaba la gestión de la escala portuaria por 25 años.
En un comunicado, el número dos del Ministerio de Defensa con competencia en el Oriente Medio, Mick Mulroy, precisa que los Estados Unidos no exigen a Israel que “evite todo trato con China”. Sin embargo, se están llevando a cabo “tratativas” con los aliados, para discutir las “implicaciones para la seguridad nacional” que conllevarían las inversiones chinas en la región. Al mismo tiempo, el funcionario recuerda que los lazos económicos entre EEUU e Israel son un elemento “de fuerza”, pero que “hay malvados merodeando que podrían aprovecharse, si no actuamos con cautela”.
Beijing ha promovido inversiones en el sector de ferrocarriles ligeros en Tel Aviv, sosteniendo proyectos en los que está implicado el cuartel de Defensa israelí en Kirya y un puerto ubicado más al sur, situado a poca distancia de la base naval de Asdod. Para los analistas y expertos, la presencia en estos centros permitiría a la marina china monitorear los desplazamientos y los movimientos de los Estados Unidos, constituyendo una amenaza para la seguridad informática.
Volviendo al acuerdo sobre el puerto de Haifa, el gobierno hizo una salvedad (de carácter clasificado), en la que define la autoridad de los servicios de seguridad israelíes en el área y delinea roles sensibles en la estructura, con permisos selectivos ultra-secretos. A pesar de ello, la marina americana está reconsiderando sus operaciones en Haifa, y el Senado de los EEUU ya ha aprobado una moción en la cual se invita a Israel a examinar las implicaciones y temores inherentes a la seguridad.
La realidad es que el controvertido acuerdo -o al menos, controvertido para Washington- llega en el marco de crecientes lazos entre China y los aliados de los EEUU (en particular, Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos). En el 2018, Beijing prometió 23 millardos en créditos y ayudas para las naciones de Oriente Medio y está dispuesta a destinar otros 28 para inversiones e infraestructuras. Además, del 2013 al 2017, vendió armas por 10 millardos de dólares y tiene planeado levantar bases militares en la región.
03/10/2020 10:35
14/10/2020 15:12