Diálogo interreligioso, "un riesgo que vale la pena correr
Roma (AsiaNews)- "Juntos hacia la unidad de la familia humana". Es este el título del encuentro ointerreligiosos que se cierra hoy en Castelgandolfo y que ha reunido a 220 miembros de varias religiones que proceden de 31 naciones. El encuentro, inaugurado el 17 de marzo y promovido por el Movimiento de los Focolares en ocasión de la muerte de Chiara Lubich, tiene como objetivo el compartir los frutos de 40 años de encuentros que se desarrollaron entre cristianos y los representantes de las grandes religiones: hebreos, musulmanes, hindúes, sintoístas y sikh.
En el pasado se organizaron encuentros, simposios y eventos sobre todo a nivel bilateral: cristianos-musulmanes, cristianos -hindúes, etc... Es la primera vez, que se decidió compartir experiencias en modo más amplio. Como lo dijo un relator: "En Japón o n Tailandia, por ejemplo, no se conoce mucho el diálogo que está sucediendo entre cristianos y hebreos. Y para muchos musulmanes puede ser una novedad la de conocer lo que está sucediendo con el budismo y con el hinduismo".
Para todos, por lo tanto, fue de una gran riqueza, un verdadero don de Dios, sea aquel de establecer nuevas relaciones y nuevas amistades entre los participantes, sea el saber cuáles formas está tomando el diálogo en la diversas partes del mundo.
Después del augurio de un diálogo fructífero hecho a los participantes de parte de Larry Yu-yuan Wang, embajador de la República China (Taiwan) junto a la Santa Sede, el p. Miguel Angel Ayuso Guixot, Secretario del Pontificio Concejo para el diálogo interreligioso, habló de cómo se desarrolló a partir del Concilio Vaticano II y ha recordado las diversa anotaciones hechas por los pontífices en estos últimos decenios.
Juan Pablo II subrayaba la importancia del diálogo como instrumento para construir la paz. Benedicto XVI recordó a menudo la importancia de un diálogo que se haga en la verdad y que se oriente hacia la caridad, hacia un trabajar juntos por los más pobres. Con el Papa Francisco, el acento es en cambio sobre un diálogo que se base en la amistad personal y que no esconda la verdad de los que somos y creemos.
Estuvieron también las intervenciones de los miembros de las diversas religiones, los budistas han compartido su camino con los cristianos subrayando los conceptos-claves de misericordia, de despojamiento total de sí, del morir a sí mismos para mar plenamente el presente. Quien está empeñado en el diálogo hinduista-cristiano en vez ha subrayado como el diálogo haya crecido en aquellos contextos la forma de un compromiso social común por los más pobres y por los que están fuera de las castas, con muchas actividades comunes, sobre todo en el ámbito educativo.
Las religiones fueron a menudo acusadas de ser irrelevantes o un obstáculo para el cambio social o en algunos casos se alejaron, limitándose a ritos y funciones. El desafío es en cambio la de mostrar que fe y vida son inseparables. Un relator decía: "más se ama y se tiene confianza en Dios, más se ama y se tiene confianza en el hombre. Más se ama y se tiene confianza en el hombre, más se ama y se tiene confianza en Dios".
Del diálogo hebreo-cristiano surgió en vez una más profunda libertad en el hablar, en el confrontarse y en el colaborar que anteriormente estaba marcado por fuertes prejuicios. En concreto del diálogo con los musulmanes surgió la importancia de ser un signo de unidad y fraternidad, sobre todo en los contextos (como en Tierra Santa) donde motivos políticos y culturales crean enfrentamientos y divisiones. El ser hijos del mismo Dios es muy importante más que las divisiones culturales y políticas.
Durante este encuentro a menudo se recordó que el diálogo es un riesgo y que se encuentran tantos obstáculos. Pero es un riesgo que vale la pena correr. El diálogo, cuando se hace con la verdad y la humildad, nos cambia por dentro y nos hace ir más al fondo en nuestras respectivas tradiciones religiosas. Nos hace apreciar la diversidad y nos ayuda a cooperar para que el mundo sea más humano. Varios participantes han compartido que el diálogo no es un instrumento para obtener algo, no es una estrategia. ¡Debe convertirse en un estilo de vida!
17/12/2016 13:14
06/02/2021 14:21