Director POM: Mes misionero extraordinario, para renovar a la Iglesia india

La cita mundial es para octubre de 2019 deseada por el Papa Francisco. Ayer en Vijayawada se realizó el primer encuentro de los coordinadores diocesanos de la región de Andhra-Telangana. La renovación de la misión a partir de las parroquias. Los católicos “deben abandonar el provincialismo y las divisiones de casta”.

Vijayawada (AsiaNews) – La ocasión es “para renovar desde dentro la Iglesia católica y la fe, superar las divisiones y renovar la misión en India”. Es la finalidad del Mes misionero extraordinario de octubre de 2019 según el p. Ambrose Pitchaimuthu, director nacional de las Pontificias Obras Misioneras (POM) en India. A AsiaNews él cuenta sobre las iniciativas lanzadas ayer en Vijayawada, durante el primer encuentro de los coordinadores diocesanos de la región de Andhra-Telangana, patrocinado por los padres del PIME (Pontificio Instituto Misiones Extranjeras). Para el sacerdote, son “muchos los desafíos para renovar la misión en el contexto indio, donde los católicos representan una minoría”. Pero para alimentar el ardor de la “missio ad gentes”, evidencia, “debemos partir antes de todo de nosotros mismos”.

El Mes misionero extraordinario de octubre de 2019 fue lanzado por el Papa Francisco en 2017 para recordar el centenario de la promulgación de la Carta apostólica “Maximun illud”, “con la cual Benedicto XV deseó dar un nuevo impulso a la responsabilidad misionera de anunciar el Evangelio”. En India el coordinador es el p. Ambrose, que el 26-27 de febrero tendrá en Bangalore un encuentro nacional de los secretarios POM de las 14 regiones indias. Para el p. Rayarala Vijay Kumar, superior regional del PIME, “debemos difundir cuanto antes posible el texto de la Carta apostólica. Queremos traducirla a ocho lenguas, además del inglés y al telegu. La encíclica debe resonar en todo el país”.

Sobre los desafíos de la misión en el contexto indio, el p. Ambrose afirma: “Estoy fascinado por la perspectiva de renovación ofrecida a la Iglesia universal, que debe adquirir mayor conciencia del deber misionero. Todos nosotros estamos bautizados y por lo tanto, llamados a llevar el Evangelio al mundo”. Para una verdadera evangelización “ad gentes”, “el mejor modo de manifestar mi fe cristiana es a través de mi vida, mis acciones. Es por esto que mi espiritualidad debe ser profunda, firme”. En India, continúa, “los católicos son una minoría. Pero podemos ser la sal, la luz y la levadura para la sociedad. Debemos tener una fe no comprometida”.

El sacerdote evidencia que en India, para involucrar en mayor medida a los otros, “son los católicos aquellos que deben estar más unidos e inspirados. A veces notamos disparidades en la coherencia de las ideas, en el credo y en el modo como lo practicamos. La comunidad cristiana en India y también aquella católica, está dividida por el bautismo, las castas y esa especie de provincialismo que no sostiene los valores del Evangelio de justicia, fraternidad, paz y armonía. Esta clausura mental nos impide manifestar a los otros nuestra genuina fe cristiana”. Por esto, “la nueva evangelización es una propuesta no sólo para los otros, sino también para nosotros, para ser renovados con los valores del Evangelio y realizar el sacramento que hemos recibido a través del bautismo. Pertenecemos todos a una única familia”. Esto puede suceder, sugiere, “en las comunidades de base, que tienen un profunda fe en la palabra de Dios y en los sacramentos. La Iglesia india debe volverse más vibrante”.

El sentido de Dios, concluye, “se experimenta a través de la liturgia, la eucaristía, la oración, el Evangelio y las obras. Es un conjunto de dinamismo y vida espiritual. Pero también a través del canto, y es por esto que hemos pensado en competiciones canoras para los niños. Laicos, jóvenes, animadores y catequistas deben descubrir la misión en sí mismos. Tenemos que hacer un enorme trabajo con los niños ´especiales´, o sea aquellos que presentan discapacidades físicas y mentales”.