Diplomáticos italianos: Ya ‘había sido depuesto’ el embajador norcoreano en fuga

Aumenta el misterio sobre la desaparición de Jo Song Gil. El encargado de negocios del Norte habría terminado su cargo a fines de noviembre. Estaba en Roma desde mayo de 2015. Para los observadores, Roma quiere evitar tensiones con Pyongyang. La sombra de las potencias bélicas sobre el proceso de paz en la península coreana.

Seúl (AsiaNews) – Jo Song-gil, de 48 años “encargado de negocios” de Corea del Norte en Italia desapareció desde el pasado noviembre (Foto), ya había sido “substituido en sus funciones por el funcionario Kim Chon”. Las autoridades diplomáticas en Corea del Sur confirman la alternancia, sucedida el día 20 del mismo mes. Es cuanto afirman las agencias surcoreanas citando fuentes internas en la embajada de Italia en Seúl.

Haciendo públicas informaciones de la National Intelligence Service (NIS), ayer el parlamentario surcoreano Kim Min-ki había anunciado la fuga de Yo y de su familia. Algunas horas antes, un cotidiano de Seúl había declarado que el diplomático presentó un pedido de asilo “para un país occidental no precisado” y ahora está “bajo protección de las autoridades italianas”.

El ministerio de Exteriores de Roma desmintió las indiscreciones, afirmando que “no resulta un pedido de asilo por parte de un funcionario norcoreano”. La Farnesina agregó que “por vía diplomática fue en su momento comunicado al ministerio” la substitución del funcionario. Por su parte, la Oficina presidencial de Seúl afirmó “no saber nada la respecto”.

Jo Song Gil, que a fines de noviembre habría terminado su trabajo, estaba en Roma desde mayo de 2015, cuando asumió las funciones de Primer secretario de la delegación norcoreana. En 2017, el gobierno italiano alejó al diplomático Mun Jong-nam, como sanción por los test de misiles del régimen de Kim Jong-un y el 9 de octubre de 2017, Jo lo sucedió como “encargado de negocios”. Este es el cargo diplomático norcoreano más importante, porque en Italia el país no tiene un embajador.

Mientras el misterio alrededor de la desaparición de Jo aumenta, para algunos observadores la posición del gobierno italiano se explica la voluntad de no aumentar la tensión con Pyongyang: por esto la noticia se difundió de fuentes surcoreanas, casi un mes antes después de la fuga. Otras potencias, regionales y no, tendrían en cambio interés en desestabilizar el proceso de paz en la península coreana, donde se focalizan las atenciones de las más importantes industrias bélicas mundiales.