Daca, Covid-19 y periodistas: son casi 700 los infectados, las víctimas 27 y un millar de desocupados

de Sumon Corraya

Después de los médicos y operadores sanitarios, la de los cronistas es una de las categorías más afectadas por el Covid-19. Muchos denuncian la falta de medios de protección personal, aún narrando la pandemia desde la línea del frente. En estos meses 244 cotidianos sobre 340 interrumpieron sus publicaciones. Periodista católico: “Estoy desocupado, no sé qué hacer”.

Daca (AsiaNews) - Después de los médicos y operadores sanitarios, entre las categorías más afectadas en Bangladés por la pandemia del nuevo coronavirus están los periodistas, con un total de 678 casos comprobados en los últimos cinco meses. De estos afectados por el virus, al menos 27 murieron a causa del Covid-19 y la mayor parte de ellos trabajan en los medios reales- TV, prensa y online- de la capital Daca.

Algunos cronistas denuncian la falta de medios adecuados de protección personal, entre los cuales las mascarillas, mientras se encontraban narrando sobre el virus desde la línea del frente, en particular los hospitales. Otros afirman que detrás de los picos de contagio existe la necesidad de viajar y entrevistar encontrando a las personas para obtener informaciones. Además, detrás de una parte de los decesos habría imprudencia y negligencia en el respeto de las normas sanitarias de los periodistas individuales.

Liton Rahaman, periodista de Daca, subraya a AsiaNews que “un médico o un enfermero pueden entender quién está infectado o no y quién no, pero un periodista para obtener informaciones pasa del doctor al vendedor de pescado, al ministro. Encuentra todo tipo de personas, pero no puede saber quién es positivo al coronavirus”. Ahmed Fayez, coordinador del grupo Our Media, Our Rights agrega que el número real de los infectados es mucho mayor, porque muchos cronistas no quieren hacer saber que están infectados y los editores no ofrecen ninguna garantía o cobertura en caso de enfermedad.

Según el Departamento gubernamental para la industria editorial y la cinematografía, en Bangladés hay 340 periódicos. A causa de la pandemia del nuevo coronavirus 244 han interrumpido las publicaciones y sólo 86 continúan funcionando a plena potencia. En Daca sólo 10 cotidianos pagan en modo regular los sueldos a sus propios cronistas, la mayor parte no tiene coberturas suficientes para pagar los salarios.

La crisis económica afecta también a los operadores de los medios, tanto que en pocos meses más de un millar de periodistas perdieron el trabajo. Muchos de ellos, por status y orgullo, no quiere pedir subsidios ni ayudas, otros en cambio decidieron cambiar trabajo para poder sobrevivir. Víctor K Rozario, periodista católico que trabaja en un cotidiano online de Daca, nara que fue infectado por el virus y ahora está curado. Por el momento está sin trabajo y volvió a su pueblo nativo en Natore. “Estoy desocupado-afirma- y busco una nueva ocupación. No sé qué hacer” y la crisis de los medios no ofrece espirales en el breve período.

Un operador de medios, anónimamente, ataca a los editores que no harían nada para preservar la integridad física de los periodistas durante la pandemia. “Muchos propietarios de los periódicos- explica- no proveen los medios de transporte, no se preocupan si lo periodistas se infectan y se vuelven positivos al coronavirus. El punto es que nosotros trabajamos en primera línea, para asegurar hechos y noticias a la gente”. Es más, concluye, muchos editores en vez de ayudar aprovechan de la pandemia para liberarse del personal.