Cristianos tras la sentencia de Cachemira: "Ahora hay que promover el desarrollo para todos"
La hermana Maria Suzette, de la congregación del Carmelo Apostólico, que vive desde hace 16 años en la disputada región de mayoría musulmana, cuenta su experiencia a AsiaNews. Ayer, un panel constitucional emitió un veredicto según el cual la revocación de la autonomía de Cachemira en 2019 fue un acto legítimo del gobierno liderado por Narendra Modi.
Srinagar (AsiaNews) - "Aunque acepto el veredicto del Tribunal Supremo sobre Cachemira, espero que los jóvenes que viven en la región sean educados para convertirse en buenos ciudadanos y que la gente común pueda vivir en paz." Estas son las palabras de sor Maria Suzette, de la congregación de las Carmelitas Apostólicas, después de que un panel constitucional de cinco jueces dictaminara ayer que el gobierno indio actuó legalmente en 2019 cuando revocó la autonomía de Jammu y Cachemira, garantizada por el artículo 370 de la Constitución.
El tribunal, presidido por el juez D.Y. Chandrachud, dictaminó que el artículo 370 era una disposición temporal "necesaria debido a las condiciones de guerra en el estado" y no tenía por objeto desarrollar la "soberanía interna", reza el fallo. El estatus especial debía considerarse "una característica del federalismo asimétrico, no de la soberanía", especificaba el tribunal. Sin embargo, en su veredicto, el Tribunal Supremo no se pronunció sobre la validez de la llamada Ley de Reorganización de Jammu y Cachemira, la ley de 2019 que prevé que Jammu y Cachemira pasen a formar parte de la Unión India como dos Estados separados. Sin embargo, ordenó la celebración de elecciones locales antes de septiembre de 2024.
La región histórica de Cachemira está en disputa desde la segunda mitad de la década de 1940 entre India y Pakistán, que administran diferentes partes de ella (China también controla una sección muy pequeña). En la parte administrada por India viven 12 millones de personas, el 70% de las cuales son musulmanas, lo que convierte al territorio en el único de mayoría musulmana de todo el país. En 1949, las Naciones Unidas pidieron a Pakistán, que quería anexionarse el territorio, que retirara sus tropas, y a India que organizara un referéndum para que los ciudadanos cachemires pudieran decidir libremente si se vinculaban a Nueva Delhi o a Islamabad. Ninguna de las dos eventualidades llegó a materializarse: en su lugar, con el tiempo surgieron grupos islamistas rebeldes que atacaron al ejército indio, y hoy, con cerca de 130.000 soldados indios, Cachemira es el territorio más militarizado del mundo. En 2019, el gobierno dirigido por el primer ministro Narendra Modi desmanteló el parlamento local tras imponer un apagón de las comunicaciones, detuvo a cientos de activistas y confinó en sus casas a varios antiguos líderes del gobierno local, anexionándose de hecho la región.
La Hna. Maria Suzette vivió todos estos acontecimientos de primera mano, tras haber trabajado en Jammu y Cachemira durante 16 años: "Como educadora, fui testigo de la falta de instalaciones para agudizar las aptitudes físicas y mentales de los jóvenes". La monja carmelita apostólica fue vicedirectora de la Burn Hall School de Srinagar, institución dependiente de la diócesis de Jammu y Cachemira. "Confiamos en que este veredicto del Tribunal Supremo traerá desarrollo y progreso a todos, especialmente a los débiles, pobres y vulnerables de la sociedad".
Preguntada por AsiaNews sobre su experiencia como vicedirectora, Sor Suzette declaró: "Los niños de Cachemira son brillantes, pero las incertidumbres del territorio perturban el ritmo de sus vidas. Durante mi estancia en el colegio Burn Hall, hicimos todo lo posible por mantener a los alumnos en contacto con la vida escolar a través de diversas actividades". Además, prosigue la monja, se hizo hincapié en la enseñanza de la lengua cachemira: "A menudo insistí y di instrucciones a los profesores para que se aseguraran de que los alumnos aprendieran cachemira, como debe hacerse con las culturas y lenguas autóctonas. Una persona sin conocimiento de su lengua o cultura es un ser humano sin un pedestal adecuado". Hoy, la Hna. Suzette trabaja como directora en el Apostolic Carmel and Junior College, en Bandra, Mumbai. "En Cachemira, los padres cooperaban. Los educadores hicimos todo lo posible por guiar a los niños para que formularan su propia visión".
Sobre la sentencia, monseñor Ivan Pereira, obispo de Jammu-Srinagar, declaró a AsiaNews que todo lo que diga el Tribunal Supremo "es bienvenido".
"Cualquier decisión tomada en el interés general de la paz en Jammu y Cachemira debe ser bienvenida por todos", comentó en cambio Sydney Rath, católico cachemir.
09/08/2019 16:03
23/06/2021 14:54