Covid-19: Japón compra 150 millones de dosis de Novavax

Las vacunas serán distribuidas a partir de 2022. La respuesta a la pandemia y la desigualdad de ingresos, los temas centrales para el ex ministro de Asuntos Exteriores Fumio Kishida, quien se presenta oficialmente como candidato a la dirección del Partido Liberal Democrático. Se espera que hoy también presente su candidatura la ex ministra del Interior Sanae Takaichi.

Tokio (AsiaNews/Agencias) - Japón ha comprado 150 millones de dosis de la vacuna estadounidense Novavax, que serán distribuidas a partir de principios de 2022. Así lo anunció ayer el Ministerio de Sanidad japonés, añadiendo que la compañía farmacéutica Takeda será la encargada de producir la vacuna en el país, una vez que haya recibido la aprobación del mismo ministerio.

Ayer se registraron 10.634 nuevos contagios y 62 muertos por Covid-19. Gracias a la ampliación del estado de emergencia en varias prefecturas desde finales de agosto -cuando Japón informó casi 25.000 casos en un día-, el número de contagios ha empezado a descender.

Con la pandemia de Covid-19, también se han exacerbado las desigualdades de ingresos. Así lo afirma el ex ministro de Asuntos Exteriores Fumio Kishida, quien anuncia su candidatura a las elecciones internas del Partido Liberal Democrático el próximo 29 de septiembre, que designarán al sucesor del primer ministro Yoshihide Suga.

En la carrera electoral también se espera la participación del ministro de Reforma Administrativa, Taro Kono, el favorito en los sondeos, y de la ex ministra del Interior, Sanae Takaichi.

Al presentar sus propuestas económicas, Kishida explicó que en Japón, el neoliberalismo y la desregulación, ambos fomentados por las reformas de los primeros años del 2000, han ampliado la brecha entre ricos y pobres. "Sin distribución de la riqueza, no habrá aumento del consumo y la demanda, y tampoco crecimiento", dijo. El ex ministro también reiteró la necesidad de un paquete de estímulo económico de "decenas de billones de yenes" para contrarrestar los efectos de la pandemia.

En cuanto a Takaichi, los medios locales aseveran que cuenta con el apoyo del ex primer ministro Shinzo Abe. De ser elegida, sería la primera mujer en la historia de Japón en ocupar el cargo de primera ministra. Procedente del ala más conservadora del partido, actualmente se encuentra en una posición baja en las encuestas. Takaichi dijo que quiere trabajar en los asuntos que dejaron sin resolver las administraciones anteriores. Entre ellos, limitar la inflación al 2% e introducir una legislación "para evitar que se filtre información sensible hacia China".