Coronavirus: muerto un quinto médico en Wuhan

Hu Weifeng había contraído el Covid-19. Él era un colega de Ai Fen y Li Wenliang, los primeros en lanzar la alarma por la pandemia. Miles de médicos contagiados por los atrasos del gobierno en el declarar la emergencia. Después de 10 millones de test, las autoridades declaran que Wuhan está libre del morbo.

Beijing (AsiaNews) – Un quinto doctor del Hospital central de Wuhan murió ayer por el coronavirus. Hu Weifeng, un urólogo de 42 años, había contraído el Covid-19 hace 4 meses. Deja su esposa y dos hijos.

Hu estaba desde hace tiempo. Su muerte, como la de sus colegas es vista por muchos observadores- en China y en el extranjero-como un ejemplo de la fracasada gestión de la emergencia pandémica por parte del gobierno chino.

Wuhan es la ciudad donde explotó la pandemia in dicembre. La capital de Hubei cuenta con 50 mil de los 84 mil casos registrados en China. Oficialmente, las muertes ciudadanas son 3869, sobre un total de 4645 en todo el país.

En las primeras fases del contagio y hasta el 23 de enero, cuando fue decretada la cuarentena para Wuhan, los líderes de Beijing negaban la existencia de la infección pulmonar. en este lapso de tiempo, el personal sanitario ciudadano se contagiaba porque no usaba las necesarias protecciones. Según datos de la Organización mundial de la salud, 3387 médicos y enfermeros chinos resultaron positivos al coronavirus en febrero: el 90% de los casos se relacionaba con Hubei.

Hu era un colega de Li Wenliang, oculista de 34 años que fue detenido por la policía y una censura por haber hablado en público sobre la epidemia. Li murió a causa de la infección el 7 de febrero. Otros dos oculistas del Hospital central de Wuhan (Mei Zhongming y Zhu Heping) murieron en marzo; la misma suerte le tocó a Jiang Xueqing, un cirujano.

Li había hecho circular las informaciones compartidas por Ai Fen, la doctora que fue la primera en haber lanzado la alarma sobre el coronavirus. En un

at (el Twitter chino) el 30 de diciembre, Ai pedía a las autoridades que intervinieran rápidamente contra el morbo, pero sin obtener ningún resultado. Al contrario, sus superiores le ordenaron callar para no crear el pánico, acusándola de ser una delatora. Ai desapareció a mitad de marzo; se teme haya sido arrestada por haber narrado a la revista “People” (Renwu) su historia.

La muerte de Hu y la de los otros médicos de Wuhan contrasta con los tonos triunfalistas de la administración local, que justamente en estos días declaró que la ciudad ganó la batalla contra el coronavirus.

El 1° de junio, las autoridades sanitarias concluyó los test diagnósticos sobre 10 millones de residentes, identificando 300 casos asintomáticos. La investigación intensiva, que costó 900 millones de yuan (113 millones de euros) inició después del descubrimiento de un nuevo foco de infección y contagio a los primeros de mayo. Los datos oficiales no reportaban casos de infección desde desde el 3 de abril, aparte de aquellos importados del exterior.