Contra el divorcio y la crisis matrimonial, los obispos vietnamitas lanzan el Año de la Familia

de Thanh Thuy

En 2016 hubo más de 60 mil casos de divorcio en todo el país. La causa de la separación son los estilos de vida de la familia, seguido por el adulterio y la violencia. La crisis afecta principalmente parejas jóvenes. Oraciones y reuniones para reconstruir la unidad fundamental de la sociedad.

Ho Chi Minh (AsiaNews) - Para hacer frente a los retos planteados por la modernidad, para reconstruir el tejido social y personal cada vez más roto, la Iglesia vietnamita ha decidido dedicar el 2017 a la familia que siempre ha sido considerada como la unidad básica y fundante del país. Los obispos han decidido dedicar una atención especial a los nuevos núcleos en formación, para lo cual se han previsto seminarios y cursos dedicados a parejas que se preparan para el matrimonio y la vida familiar.

De acuerdo con los datos oficiales de 2016, cada año se producen más de 60 mil casos de divorcio en Vietnam. Y la tendencia, advierten los expertos, está creciendo.

La principal causa de divorcio es el choque en el estilo de vida familiar y los problemas cotidianos. Esto es seguido por adulterio (25,9%), los problemas financieros (13%), violencia doméstica (6,7%), salud (2,2%) y el hecho de vivir a grandes distancias [los conyuges].

Lo más preocupante es que la cifra se incrementa no sólo por las separaciones en las ciudades y los grandes centros urbanos, sino también en las zonas rurales. Por otra parte, los casos de divorcio en parejas jóvenes es de más de 70% entre 22 y 30 años. En este contexto, más del 60% de los hogares están casados por uno a cinco años y ya han tenido hijos en común.

Números alarmantes, que han llevado a la Iglesia Católica para formar catequistas y religiosos, con el objetivo de fortalecer la pastoral familiar a través de encuentros, grupos de escucha, asesoramiento y la oración. Una respuesta a la llamada lanzada por sacerdotes y operadores, que destacó la necesidad de un camino basado en la fe, el único elemento en el que basar una relación que puede ser bastante permanente.

Entrevistado por AsiaNewsel el Sr. Thu trabajador social de la arquidiócesis de Saigón [ahora Ho Chi Minh, ndr], confirma que "una parte de las parejas jóvenes aún no es consciente del significado del matrimonio y la vida familiar". A menudo la palabra divorcio se utiliza como una "amenaza", en las discusiones de la vida cotidiana. El matrimonio, añade, se convierte en el escape por el cual se abandona la unidad familiar original, pero sin entender lo que conduce a una vida en común con otra persona. "Y así con la primera dificultad - concluye - no son capaces de superarla",

La Sra Hien, católica activa en trabajo social en Đà Lat, señala que si en la familia hay una "educación moral" cada miembro es capaz de "cuidar" y el "riesgo" de romper los enlaces cambia de tamaño. "Lo importante - advierte - es que las parejas sepan cómo pensar y cuidar de los demás, respetando los valores tradicionales de la familia vietnamita."

Los problemas de la familia no sólo preocupan a los católicos sino también involucran a los líderes budistas, como la religión más extendida en el país: "La fe de los padres - concluye el Sr. Huy, trabajador social budista - también ayudará a los niños, ayudándoles para superar las dificultades. Una familia se compone de personas que se aman, que ayudan a los niños a tener fe y esperanza en la vida".