Conflicto sirio: de Washington nuevas armas a los rebeldes en lucha contra Assad ( e Irán)

La política de doble cara de los EEUU con las milicias chiíes filo-iraníes: aliados de Irak, enemigos en Siria. Los enfrentamientos entre rebeldes y combatientes chiíes se concentran en el sudeste del país. El objetivo es crear una vía de provisiones que une Siria e Irak. Los problemas para la región medio-oriental y los obstáculos al proceso de reforma iniciados en Teherán.

Damasco (AsiaNews/Agencias)- Los EEUU han enviado una nueva provisión de armas a los grupos sunitas en Siria, en lucha contra el presidente Assad y las milicias chiíes apoyadas por Irán. Los mismos grupos combatientes que, en Irak, son en cambio un precioso aliado en la lucha contra el Estado islámico (EI) y en la ofensiva en acto en Mosul, bastión del “Califato”.

Los enfrentamientos en acto entre rebeldes y milicias chiíes se concentran en el sudeste de Siria, teatro en el último período de una campaña promovida por las fuerzas filo-iraníes. El objetivo de los guerrilleros chiíes es el de crear una vía de provisión que va desde Irak a siria.

La escalada de la tensión del último mes se concentra en la región de Badia, en el sudeste de Siria. Las fuerzas gubernamentales de Damasco, apoyadas por las milicias iraquíes, han iniciado graves combates contra los grupos rebeldes anti-Assad. Más allá de la frontera, se registra la transferencia de milicias filo-iraníes de Mosul hacia la frontera, para continuar también en Siria la lucha contra el Isis.

La decisión de Washington de proveer nuevas armas y medios a los combatientes sunitas hace arriesgar que se agraven la relaciones con Bagdad, que cuenta con la presencia de los guerrilleros chiíes para derrotar al Estado islámico (EI). Además, ésta lo único que haría es aumentar los ya graves reflejos también en territorio sirio exacerbando aún más una situación ya incandescente.

En su reciente viaje a Arabia Saudita, primera misión diplomática en el extranjero desde su asunción, el presidente de EEUU, Donald Trump relanzó acusaciones contra Teherán, culpable según él de “apoyar, armar y adiestrar” a terroristas y milicias en todo Oriente Medio, pero sobre todo en Irak y siria.

Analistas y expertos de política medio-oriental subrayan que, más que Teherán, son justamente los EEUU y los aliados árabes en soplar sobre el fuego del conflicto. Un grupo de estudiosos-un economista, un sociólogo y una geógrafo- citados por Le Monde recuerdan la “prueba de madurez” demostrada por los iraníes con las últimas elecciones (y la reconfirmación del moderado Hassan Rouhani) y los objetivos de “estabilidad” perseguidos por su dirigencia.

Los estudiosos subrayan que no es Irán el responsable de “la ocupación de Mosul y Raqqa” o de los atentados del 11 de setiembre o aún más de los ataques en Manchester o a Charlie Hebdo sólo para recordar algunos. Y es propiamente Irán, junto a los kurdos, la sola fuerza militar que demostró saber rechazar en el campo las ofensivas del Estado islámico en Siria e Irak.

La política promovida por el presidente americano, concluyen los expertos, en “concertación” con Arabia saudita e Israel, “no se traducirá con toda probabilidad en una guerra abierta con Irán”. Sin embargo, ésta arriesga minar la “dinámica pacífica” en acto en el país desde la asunción de los moderados guiados por Rouhani.