Conflicto sirio, ONU: nueva distribución de ayuda para las zonas asediadas

El Gobierno de Damasco ha dado luz verde para la entrega de alimentos y artículos de primera necesidad en siete áreas. Entre ellos se encuentra también la ciudad de Madaya, donde la gente muere de hambre. Moscú rechaza acusaciones de Ankara sobre el bombardeo de hospitales. El Consejo de Seguridad de la ONU critica aTurquía.

Damasco (/ AsiaNews/ Agencias) - El Gobierno de Damasco ha dado luz verde para la entrega de alimentos y artículos de primera necesidad en algunas zonas bajo asedio. De acuerdo con informes del enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, los convoyes están listos para ir a esta expedición que es una "prueba" para ver si las diversas facciones están realmente dispuestos a permitir la distribución de la ayuda. Entre las áreas objeto del envío también está la localidad de Madaya, en la cual han surgido en las últimas semanas, casos de personas que murieron de hambre y desnutrición.

La semana pasada, las potencias mundiales han acordado "cesar las hostilidades" a escala nacional y acelerar y, siempre que sea posible, ampliar la entrega de ayuda. "Es responsabilidad del gobierno sirio - dijo de Mistura, después de conversaciones de alto nivel en Damasco - permitir a todos los ciudadanos, donde quiera que estén, recibir la ayuda de la ONU".

En las últimas horas el gobierno encabezado por el presidente Bashar al-Assad, ha dado el visto bueno para la entrada de ayuda humanitaria en siete áreas bajo asedio, estrechadas por el ejército del gobierno o en las garras de las milicias rebeldes. Fuentes de la ONU dicen que hay por lo menos medio millón de personas que aún viven en zonas bajo asedio.

El cese de las hostilidades, que no se refiere a los grupos yihadistas como el Estado Islámico y el Frente Nusra, se espera que entre en vigor en el fin de semana. Sin embargo, el presidente Assad expresó dudas sobre su real eficacia, señalando que será de "difícil" aplicación.

En el campo de batalla, el ejército regular sirio, respaldado por la incursión aérea de Rusia, continúa su avance hacia el norte y está listo para el ataque en Alepo. Mientras tanto, la guerra continúa - ahora verbal - entre Turquía y Rusia, con Moscú que "rechaza categóricamente" las acusaciones lanzadas por Ankara de crímenes de guerra por bombardear hospitales en Siria, incluyendo un centro de Médicos sin Fronteras. El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo a la BBC que la única prueba que Rusia está dispuesta a aceptar del terreno "provienen de las autoridades sirias".

Ayer, finalmente, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas ha criticado a Turquía por los ataques transfronterizos, en el norte de Siria, que crean aún más la tensión y la inestabilidad en el país. Todos los Estados miembros del Consejo están de acuerdo en "pedir a Turquía respetar el derecho internacional".