Con un ojo en Viena, Teherán celebra el 43 aniversario de la revolución islámica

Una fiesta en tono menor por las restricciones debidas a la pandemia de Covid-19. En las ciudades "rojas" solo desfiles a bordo de autos y motos, mientras en el país aumentan los casos de la variante Omicron. Cauto optimismo en EEUU sobre un acuerdo "a la vista". Pero el presidente iraní Raisi apaga el entusiasmo: "No hay esperanza".

Teherán (AsiaNews)- Los iraníes celebran hoy los 43 años de la revolución encabezada por el ayatolá Ruhollah Jomeini, que condujo a la caída de Sha Reza Pahlevi y la fundación de una república basada en el islam chiita. Este año la fiesta también ha sido en tono menor debido a los brotes de Covid-19, que han aumentado en las últimas semanas debido a la variante Omicron. Por otra parte, la atención de los dirigentes está centrada en las negociaciones que se desarrollan en Viena en estos días sobre la cuestión nuclear, que podrían suponer un punto de inflexión para una economía asfixiada por las sanciones internacionales.

Miles de automóviles y motos recorrieron esta mañana las calles de Teherán para celebrar la revolución islámica de 1979. En comparación con años anteriores, por segunda vez consecutiva pocos se han sumado a la celebración marchando a pie, por temor a los contagios del nuevo coronavirus en momentos en que la pandemia sigue activa. En la capital, las columnas comenzaron en varios puntos, para luego converger como es habitual en la plaza Azadi. Por la tarde, durante los ritos de oración del viernes, el presidente Ebrahim Raisi pronunciará en esa misma plaza un discurso a la nación.

El aniversario coincide con la nueva ronda de conversaciones sobre la cuestión nuclear iraní, que se reanudó el pasado 8 de febrero en Viena tras algunas semanas de estancamiento y en torno a la cual reina un moderado (y muy cauteloso) optimismo. En los últimos días la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo que el acuerdo "está a la vista" pero advirtió al mismo tiempo que "si no se alcanza en las próximas semanas, los avances nucleares" de Teherán hará "imposible" firmarlo en el futuro. Sin embargo, el propio presidente iraní Raisi, en un mensaje de video que se difundió hoy, dijo que no tenía "ninguna esperanza" en las negociaciones y no creía "en Viena y Nueva York".

Por su parte los manifestantes deplegaron banderas iraníes y corearon las consignas y cánticos habituales, llevando pancartas con frases como "muerte a América" y "muerte a Israel" que en estas ocasiones nunca faltan. Hubo marchas y carruseles en 1.500 ciudades, más de 3.000 aldeas, 60.000 mezquitas y 40.000 bases de las milicias Basij (vinculadas a los Pasdaran) repartidas por todo el territorio. En las ciudades "rojas" por las restricciones de Covid solo se realizaron desfiles de automóviles y motocicletas. En las de categoría amarilla o azul también hubo marchas a pie, respetando los protocolos de seguridad y -en la medida de lo posible- el distanciamiento entre los participantes.

Las autoridades sanitarias afirman que en este momento la variante Omicron también es predominante en Irán y los hospitales están en alerta por una posible ola de contagios y hospitalizaciones. Con más de 130.000 víctimas registradas -aunque el número real podría ser mucho mayor-, la República Islámica ostenta el triste récord del mayor número de muertes provocadas por el Covid en Oriente Medio desde que comenzó la emergencia sanitaria mundial. Teherán afirma haber vacunado cerca del 80% de la población mayor de 18 años con las dos dosis, aunque solo el 27% recibió también el refuerzo.