Con la pasión por el arte, hermana filipina recolecta fondos para ayudar a la misión
Manila(AsiaNews(Cbcp)- Una hermana filipina con la pasión por el arte, además que la vocación a la vida consagrada, decidió exponer sus propias obras y ponerlas en venta para recolectar fondos con los cuales financiar a la evangelización. La religiosa adhirió a una muestra en curso en estos días en Binondo, in distrito de Manila y con el dinero recaudado de la venta de los cuadros ayudará a las misiones en el extranjero de su congregación y los estudios de las jóvenes mujeres que quieren dedicar su vida a Dios. En particular, Sor Venus Marie S. Pegar pintó 3 de las 80 obras expuestas desde el 14 de marzo hasta mitad de abril en el Manila International Peace Center.
Lo recaudado de una eventual venta de los cuadros (en la foto una de sus obras) “irá a las misiones pobres de Myanmar”, cuenta la hermana Pegar y “a las mujeres que desean hacerse hermanas, pro que no tienen recursos suficientes para poder estudiar”.
La hermana utiliza la técnica del óleo sobre tela. La primer obra se tiene por título “Detrás de su complejidad”, la segunda “Más allá de sus pensamientos” y la última “Su color”. La trilogía está centralizada sobre la figura de la mujer, que la religiosa y autora describe como “madurada en el tiempo”. “La jovencita-agrega- ahora es ya una mujer, vestida de amarillo y “pronta para enfrentar los nuevos desafíos”.
Detrás de los pensamientos, las angustias y las preocupaciones de la mujer, explica sor venus, está la búsqueda de la paz y de un puerto seguro, que ella encuentra en Dios. “Su salvación reside en Dios- hace notar- por esto nada teme”. Los cuadros se pueden adquirir a precios variables, según la obra, entre los 15 y 10 mil pesos (poco más de 220 dólares).
Nacida en Leyte hace 38 años, sor Pegar inició a pintar a solo 8 años, cultivando la pasión por el arte ya al interior de la propia familia. El padre y dos de sus hermanos, de hecho, son artistas de profesión. Junto a la enseñanza y con el permiso de sus superiores, la religiosa continuó cultivando el placer de la pintura.
Y si las religiosas de la congregación de las Hermanas de S. Francisco la apoyan en su pasión por el arte, la familia continúa ayudándola a su modo: le compran el material que ella usa para pintar sus cuadros.
Sor Pegar es también directora vocacional y se ocupa de la formación de las postulantes. A esto se agrega la atención de 20 huéspedes de un centro católico para ancianos y personas solas en Laguna, en la isla de Luzón.
