Con la 'Misa del gallo', los católicos se están preparando para las celebraciones de Navidad

de Santosh Digal

El gesto se remonta al siglo XVII y también involucra a las comunidades en el exterior. Durante la novena, los filipinos rezan por sus familias, la paz en el país y en el mundo. El cardenal Tagle pide el fin de las disputas y la discriminación contra diferentes culturas y creencias. El desempleo, las drogas y la violación de los derechos humanos: estos son algunos de los problemas sociales más graves en el país.

Manila (AsiaNews) - Con el Simbang Gabi inició el 16 de diciembre, la novena de Navidad en honor a la Virgen María, una de las celebraciones más importantes y antiguas de la tradición católica filipina. Se prepara para el nacimiento de Cristo y expresa la fe de que Dios encarnó en Jesús, murió y resucitó. El Simbang Gabi, también conocida como “Misa de Gallo” (Misa del Gallo) o “Misa de Aguinaldo” (misa del Don), debe su nombre a la misa diaria que se celebra el primer amanecer, por los nueve días antes de Navidad. El gesto, que data del siglo XVII, también involucra a las comunidades filipinas en el extranjero, donde viven más de 10 millones de trabajadores migrantes. Es un "sacrificio por amor" que requiere levantarse temprano en los días de trabajo normal. "El Simbang Gabi indica claramente el profundo sentimiento católico del pueblo filipino", dijo el misionero P. Jerry Vallomkunnel.

Durante la novena, los filipinos rezan por sus familias, la paz en el país y en el mundo. En su homilía en la Catedral de Manila, el arzobispo Luis Antonio Tagle pidió el fin de las disputas y la discriminación contra las personas de diferentes culturas y creencias. El cardenal se centró en superar la división y habló explícitamente de los sentimientos anti-musulmanes, alimentados por la reciente crisis de Marawi. "Construyamos relaciones para destruir el muro que divide y, a menudo, lleva a la violencia y la indiferencia", dijo el cardenal Tagle. "Eliminemos la tendencia a discriminar a otros que son diferentes de nosotros. Espero que la relación entre cristianos y hermanos musulmanes cambie para mejor".

Mons. Martín Sarmiento Jumoad, arzobispo de Ozamis, diócesis situada en la isla meridional de Mindanao, donde se concentra la población musulmana, instó a los fieles a no perder de vista el verdadero significado de la Navidad, o celebración del nacimiento de Jesucristo. "Se da a sí mismo para salvarnos". La Navidad es sobre el amor, el perdón y la reconciliación. Este es el momento oportuno para reconciliar, perdonar y renovarnos. Damos y compartimos, no solo recibimos. Cuando algo ya está en exceso, significa que ya no te pertenece. Debe ser compartido con otros", dijo Mons. Jumoad.

Filipinas ha enfrentado varios problemas sociales graves durante años. Uno de estos es el desempleo generalizado: hay aproximadamente 8,7 millones (18,9% de la población) de filipinos mayores de 18 años sin trabajo. Otra preocupación es el uso extensivo de drogas, al que el gobierno del presidente Rodrigo Duterte responde con una violenta guerra contra traficantes y drogadictos. Los líderes católicos y los grupos de la sociedad civil también denuncian el aumento en el país de las violaciones de los derechos humanos. "Estamos en una encrucijada. Hay tantos problemas y políticas que se están pensando. Solo esperamos que todo sea por el bien de nuestro país y nuestra gente", dice el p. Jerome Secillano, secretario ejecutivo de la Comisión de Asuntos Públicos de la Conferencia Episcopal (Cbcp - Pac). El sacerdote dice que, a pesar de los problemas diarios y la situación actual de la nación, las personas no pierden la esperanza, especialmente en esta temporada navideña. "De hecho, el mensaje de Adviento tiene que ver con la esperanza de algo mejor", concluye el p. Secillano.