Colombo: Prageeth Eknaligoda, desaparecido hace 11 años y la batalla por la justicia
El 24 de enero de 2010, el periodista y activista desapareció en la nada. Las sospechas recaen en el aparato estatal y la familia Rajapaksa. En memoria de su esposo, Sandaya Eknaligoda creó un sitio web para ayudar a buscar personas desaparecidas. La determinación de la mujer: "Seguiré adelante y no tengo la menor intención de dar marcha atrás o interrumpir mis esfuerzos".
Colombo (AsiaNews) - “Solo quiero decirle una cosa a los Rajapaksa: aunque maten a un hombre llamado Prageeth Eknaligoda, no podrán matar su genio, sus obras, su pensamiento. Eso será transmitido por los hijos de Prageeth a todos los que buscan justicia en este país, a los que creen en la ley y quieren construir un lugar mejor”. Este fue el mensaje de Sandaya Eknaligoda en el acto que se llevó a cabo ayer en Colombo para recordar la memoria de su esposo, el periodista Prageeth Eknaligoda, secuestrado y desaparecido en 2010 en circunstancias misteriosas. Desde hace 11 años, la mujer lucha para obtener justicia en este oscuro asunto en el que las sospechas se orientan hacia las altas esferas del gobierno y dos hermanos que desde hace mucho tiempo están en el poder en Sri Lanka.
En los últimos años, sus demandas de justicia han caído en el vacío. No solo eso, sino que en este incansable viaje en busca de la verdad junto a sus dos hijos, hoy más que jóvenes, debió enfrentar grandes desafíos, sufrir amenazas y presiones, insultos e incidentes angustiosos. Una carga enorme, que solo una mujer con su coraje y fuerza de voluntad podría soportar y que, junto con otras madres-coraje (de tamiles y musulmanes desaparecidos), llevó a la creación de un sitio web dedicado a los cingaleses "desaparecidos". (http://eknaligodaforum.org).
El 24 de enero se cumplió el XI aniversario de la muerte de Prageeth Eknaligod, sobre el que ya no hay información cierta ni anuncios oficiales. El sitio web es la mejor forma que encontró su esposa para mantener viva su memoria: allí se pueden encontrar noticias y documentos sobre las víctimas de desapariciones forzadas o secuestros misteriosos en el país y permite al mismo tiempo que se escuche la voz de los familiares en su búsqueda de justicia y verdad.
El evento de anoche fue organizado por "Eknaligoda Forum" en colaboración con Sandhaya Eknalligoda y tuvo lugar en las instalaciones del Centro N.M.Perera en Colombo, de 4 a 6 de la tarde, en cumplimiento de las normas establecidas por las autoridades sanitarias para la pandemia de COVID-19. Muchas personas que no obtuvieron la autorización para estar presentes siguieron las intervenciones y el debate gracias a la retransmisión en directo.
“El viaje en busca de Prageeth - dijo la mujer a AsiaNews - no fue fácil para mí. Por un lado, tuve que afrontar sola la lucha por la vida cotidiana, y criar dos hijos. Por otro lado, paralelamente, la lucha en busca de Prageeth. En estos 11 años, en varias oportunidades solo mi conciencia sabe cómo logré sobrevivir sin dinero, sin comida, sin nada que ofrecer a mis hijos. Hoy estoy aquí porque mi familia, mis amigos, mis aliados, han estado a mi lado de todas las formas posibles".
Sandaya dice que no busca compasión o alivio del dolor, y que su único objetivo, que es también la razón de su vida, es descubrir qué le sucedió a su esposo, cuál fue el verdadero fin de Prageeth. “Hubo algunos avances en esta búsqueda”, agrega, pero de lejos hay muchas más insatisfacciones, frustraciones y desesperación. Sin embargo, seguiré adelante y no tengo la menor intención de dar marcha atrás o interrumpir mis esfuerzos".
La apoyan en la batalla, activistas y personalidades destacadas de la lucha por los derechos humanos en el país, muchos de los cuales estaban presentes en el evento de ayer. El ex Alto Comisionado para los Derechos Humanos en Sri Lanka, Ramani Muttetuwegama, señala que las misteriosas desapariciones son parte integral de la estructura del Estado. “Las desapariciones - afirma la mujer - pueden llevarse a cabo a discreción del Estado, y pueden terminar en el momento que ellos quieran. Así es la situación en Sri Lanka”.