Celebraciones del 1 de julio: Xi elogia la democracia de Hong Kong (sin demócratas)
El presidente chino visita la ciudad en el 25 aniversario de su regreso a la soberanía china y la toma de posesión del nuevo jefe del ejecutivo local. Barrios enteros aislados y severas restricciones a la cobertura de la prensa. Enumeró los objetivos que debe alcanzar el nuevo gobierno de la ciudad.
Hong Kong (AsiaNews) - El presidente chino Xi Jinping celebró los 25 años del regreso de la ciudad bajo soberanía china y la entrada en funciones del nuevo jefe del ejecutivo de la ciudad, John Lee, pero lo hizo con la élite pro-Beijing, no con el pueblo de la antigua colonia británica. Durante su visita de dos días hubo un despliegue masivo de las fuerzas del orden y quedaron aislados barrios enteros, con severas restricciones a la cobertura de la prensa, tanto local como extranjera.
En su discurso, Xi dijo que la "verdadera democracia" de Hong Kong comenzó después de su regreso a manos chinas en 1997. El presidente chino afirmó que la dictadura del Partido Comunista Chino es la verdadera democracia, no las "formalidades" del modelo occidental. A pesar de lo que él afirma, los hongkoneses deben haber pensado de otra manera en las elecciones parlamentarias de diciembre, cuando solo acudió a las urnas el 30,2% de los votantes. Un mínimo histórico tras la reforma electoral impuesta por Beijing que solo permitió la postulación de diputados "patrióticos" leales al Partido y eliminó la representación prodemocrática.
En el "democrático" Hong Kong hoy no había ni rastro de demócratas. Al igual que el año pasado, no se pudo realizar la tradicional marcha del 1 de julio. La ley de seguridad nacional impuesta por Xi aniquiló el frente democrático y en este momento todos los organizadores del evento están en la cárcel o bajo control policial.
La primera marcha, el 1 de julio de 2003, reunió a 500.000 personas: era contra una ley antisubversiva propuesta por el ejecutivo de la ciudad que encabezaba Tung Chee-hwa. El año pasado, desafiando a las autoridades, solo un grupo de cuatro miembros de la Liga de Socialdemócratas realizó una manifestación de protesta en Wan Chai. Este año la policía se adelantó a los acontecimientos confinando en sus domicilios a varios miembros del grupo político, uno de los pocos que todavía no ha desaparecido bajo los embates de la ley de seguridad.
Xi fue claro al describir el futuro que espera para Hong Kong. Ningún cambio en el formato "un país, dos sistemas", que debería haber garantizado un alto grado de autonomía para la ciudad según los acuerdos con Gran Bretaña. Xi afirmó que Hong Kong mantendrá un régimen capitalista, su tradicional estilo de vida y el ordenamiento jurídico del Common Law (introducido por los británicos) hasta 2047.
Pero solo los "patriotas" pueden gobernar Hong Kong, porque no se puede entragar el poder a los "traidores", un eufemismo para referirse a las figuras prodemocráticas y a todos aquellos que protestan desde 2014 para exigir más libertad y más democracia para la ciudad. En palabras de Xi, nadie puede cuestionar la "jurisdicción general" de Beijing sobre Hong Kong.
No faltaron las advertencias a Lee. Xi enumeró una serie de objetivos que debe lograr el nuevo gobernante local, entre ellos mejorar la eficiencia administrativa e impulsar la economía. Según Xi, lo que los hongkoneses realmente quieren es una vida mejor, una casa más grande, más oportunidades para abrir negocios innovadores, mejor educación y mejor atención a los ancianos.
La reciente fuga al exterior de miles de residentes de Hong Kong cuenta una historia diferente, en una ciudad que tenía un estatus "global" y que ahora corre el riesgo de convertirse en una mera megalópolis "china".
25/06/2021 13:33