Catequistas de Sri Lanka, ser "testigos vivos" de Dios para formar buenas personas en la sociedad
Colombo (AsiaNews) - Enseñar el catecismo "es un regalo de Dios Es también un compromiso para crear buenas personas en la sociedad. Es un servicio con placer, no por trabajo, que nos lleva a los mismos catequistas a un crecimiento personal. Hoy Sri Lanka se necesita este servicio más que nunca". Es la opinión compartida de los catequistas católicos del país, que celebraron el 27 de septiembre el Día Nacional del catecismo. Erampa Fernando, Chaminda Costa y Sajith Perera, profesores de la Wewala Daham Pasala (Escuela Dominical) de la archidiócesis de Colombo, dijeron a AsiaNews: "Es un regalo de Dios para servir como catequistas a los niños, porque los cimientos de la catequesis tienen un enorme valor y significado".
Erampa Fernando, director de la escuela, explica la importancia de la labor de los catequistas, que deben ser los primeros "testigos vivientes" de la palabra de Dios. "El catecismo – dice la mujer - es una oportunidad única para introducir a Dios en la vida de una persona, para hablar de Jesús a los demás. Cuando "enseñamos" a Dios a las personas, tenemos que ser los primeros fieles y vivir de acuerdo a sus enseñanzas. Porque no podemos transmitir y testimoniar a los demás lo que no está en nosotros. De lo contrario estaríamos mintiendo a Dios y a nosotros mismos y engañando incluso a los niños inocentes".
Chaminda Costa, profesor de la misma escuela, está de acuerdo: "Si yo no lo pongo en práctica en casa lo que enseño a los niños en la escuela dominical, no puedo hablar de acuerdo a mi conciencia". Por ejemplo, hace hincapié el hombre, "si yo no rezo, o no rezo el Rosario todos los días en casa con mi esposa y mis hijos, ¿cómo puedo pedirle a los niños rezar el rosario todas las noches con sus familias?".
De la misma opinión el p. Jayashantha Perera del Seminario Nacional, durante la misa del domingo, dijo: "Con el catecismo se presenta a Jesús a los demás. Así que cada palabra, gesto, comportamiento, no debe romper o destruir la fe de otros. Ustedes no tienen que hacer los otros pecadores y sus vidas deben estar consagradas a las otros sin divisiones de raza, casta, religión". El sacerdote conto entonces como de niño desdeñaba la enseñanza, ahora es un educador estimado. También ganó el premio “Regional wise good Teacher” de 2014.
Según Erampa, profesor durante 17 años, el papel de los catequistas toma un valor fundamental en la sociedad contemporánea de Sri Lanka, donde "todos los días escuchamos la noticia del asesinato de niños inocentes, el abuso sexual en contra de ellos, a veces perpetrados por mismos padres, familiares o vecinos". Por desgracia, "no podemos esperar mucho de las escuelas. Así que tenemos que poner más atención en la escuela dominical. Como catequistas tenemos la gran responsabilidad de guiar y proteger a los niños de nuestro país".
Por último, Sajith Rukshan Perera, otro maestro de 25 años, concluye: "Estamos muy agradecidos a Dios por elegirnos como catequistas de nuestra parroquia. Estamos muy orgullosos del trabajo que hacemos".
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