Caritas Jerusalén: Gaza es una enorme prisión, se recaudan fondos para un regalo de navidad para los cristianos

El objetivo es llegar a cincuenta mil euros para hacer un regalo a las 350 familias cristianas de la Franja. El director general cuenta que la situación es desesperante. Y es grande el deseo de escapar de la pobreza. Él no pide dinero o fondos, sino que hace un pedido para que todos los cristianos de Occidente “vengan en peregrinación” a Tierra Santa, trayendo en concreto su “cercanía y solidaridad”.

Jerusalén (AsiaNews)- “Gaza es la más grande prisión al aire libre del mundo: dos millones de personas en el límite de la supervivencia, con una desocupación del 60%, y un nivel de pobreza del 80%. Y lo mismo vale para las familias cristianas, unas 350 en toda la Franja (1.300 personas en total), de las cuales el 34% no tienen ninguna fuente de ingresos”. Es lo que afirma a AsiaNews el Padre Raed Abusahlia, director general de Caritas Jerusalén, presentando la iniciativa promovida por el ente caritativo católico para las familias cristianas de Gaza, en ocasión de la Navidad, Desde 1990, Caritas está activa en la Franja y ayuda, sin discriminar entre cristianos y musulmanes. Es también mixto el personal que emplea la institución, y todas las estructuras son abiertas, sobre todo los hospitales. Sin embargo, agrega el Padre Raed, “para Navidad hemos querido lanzar una señal fuerte de cercanía y solidaridad para con los cristianos”.

Unas 350 familias cristianas viven en Gaza, una zona devastada por guerras incesantes y sometidas a un bloqueo total impuesto por Israel. Con el propósito de permitir a estas realidades poder vivir una Navidad de fiesta y con calor, Caritas Jerusalén lanzó una campaña de colecta de fondos que tiene por título “De la familia a la familia. Regalos de Navidad para Gaza”. De este modo, el ente caritativo católico espera juntar 50.000 euros y comprar regalos que serán distribuidos el próximo 20 de diciembre, al finalizar la misa de Navidad, que será presidida por el Patriarca latino de Jerusalén, Fouad Twal.

Al presentar la iniciativa, los responsables de Caritas Jerusalén recuerdan que Navidad es un tiempo de alegría y de fiesta para muchas familias, donde se intercambian regalos y con gestos pequeños y grandes en particular hacia los niños. Por esto, el pensamiento se dirige a las realidades más desafortunadas y necesitadas, en medio de las dificultades económicas y de vida, que no tienen dinero suficiente para intercambiarse un regalo simbólico para la fiesta.

En el pasado, explica el Padre Raed, hemos lanzado. “De una mano a la otra”, pidiendo a nuestros estudiantes de las escuelas cristianas de Ramallah, Jerusalén y Belén que “comprasen un regalo para un niño pobre de Gaza: un pequeño juguete, ropa”. Ahora, prosigue, el objetivo es “ayudar a las familias, católicas, ortodoxas, etc…” El 34% de las familias cristianas de Gaza “no tiene nada”, depende en todo de la ayudas y de las asociaciones que obran en la Franja.

Además, con esta campaña Caritas Jerusalén quiere sensibilizar a la opinión pública y a los cristianos en el mundo sobre los sufrimientos de la población cristiana de Gaza. Se sienten “abandonados”, cuenta el Padre Raed, “y en muchos de ellos es fuerte el deseo de escapar, su deseo de fuga no es alimentado por las persecuciones, Hamas no usa la violencia. Ellos viven las mismas dificultades que las familias musulmanes, el problema de fondo es la falta de dinero, de trabajo, de perspectivas para el futuro”

Muchas familias de Gaza, cuenta el director general de Caritas, “esperan la Navidad y la Pascua para poder salir, al menos, una semana de los confines. Un privilegio que les es negado a los jóvenes mayores de 16 y por debajo de los 34 años de edad. Por esto sucede que, justamente durante la fiesta, muchas familias quedan separadas. Los padres van a Jerusalén, a Belén, a Ramallah a visitar a sus parientes y los hijos están obligados a permanecer en la Franja.

Al final, el Padre Raed quiere lanzar un pedido a los cristianos de Occidente. “No queremos dinero, no les pedimos que adhieran a la campaña de colecta de fondos, si bien las necesidades aumentan día a día y las necesidades son muchas”. A vosotros, cristianos de Occidente, concluye, “os pido que vengáis a visitarnos a Tierra santa, a vosotros os pido que participéis de las peregrinaciones, para venir a traer concretamente vuestra solidaridad. La permanencia de los cristianos en Tierra Santa, en esta, nuestra tierra, no es sólo responsabilidad nuestra. Obispos, sacerdotes, alentad a vuestros fieles a realizar una peregrinación a Tierra Santa, donde todo tuvo origen. No hay ningún peligro, si bien la paz es nuestro más grande deseo. Cada cristiano tiene el derecho, el deber y también la obligación de venir al menos una vez a Tierra Santa” (DS).